La directora del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) y dirigenta del Frente de Todos, María de los Ángeles Sacnun, confirmó este jueves que pese a la corrida cambiaria y la restricción interna por la falta de reservas en el Banco Central, “está garantizada la construcción del gasoducto Néstor Kirchner”.

El gasoducto, que tendrá una extensión de 563 kilómetros entre la localidad neuquina de Tratayén y Salliqueló, en el oeste de la provincia de Buenos Aires, atravesando las provincias de Río Negro y La Pampa, permitirá ampliar en un 25 por ciento la capacidad del sistema de transporte de gas natural y ayudará a desarrollar la producción creciente en Vaca Muerta.

La obra civil tiene un costo previsto de 220 mil millones de pesos, equivalentes a algo más de 1700 millones de dólares. Se estima que el gasoducto podrá estar transportando gas producido en Vaca Muerta para el invierno de 2023 (julio a septiembre), cuando ya se encuentre "apto para funcionar" (APF), aunque no esté terminada completamente esta etapa.

El APF debería alcanzarse al 20 de junio del año próximo, lo cual le permitiría al país ahorrar entre 1300 y 1500 millones de dólares de importaciones, que serían sustituidas por producción propia. Según aclararon autoridades de Enarsa, el funcionamiento del gasoducto sería posible aun cuando no esté declarado el "fin de obra", porque podrían quedar pendientes tareas de superficie.

“Para nosotros es central esta obra. Para la República Argentina es central poder avanzar con el gasoducto. Va a llevar adelante una inversión de alrededor de 1.500 millones de dólares y tiene un recupero en el mismo año con un impacto en la balanza comercial de más de 3 mil millones de dólares”, sostuvo Sacnun por AM750.

“Pero además creo que no se puede todavía ver el impacto que va a tener en las economías regionales. Estamos hablando de una gran cantidad de puestos de trabajo, tanto directos como indirectos. Que pueden multiplicarse en la medida que la energía ayude a apalancar justamente el desarrollo económico”, añadió la exsenadora.

Finalmente, apuntó: “Con lo cual, para la República Argentina resulta prioritario y más teniendo en cuenta que hoy, desde el punto de vista geopolítico, el mundo está discutiendo la provisión de energía y de alimentos, que es lo que la Argentina puede justamente proveer”.