En la audiencia pública sobre políticas de niñez y adolescencia que se realizará hoy, desde las 9, en el Concejo Municipal, el Movimiento de Trabajadores de Salud Pública por los Derechos de los niños, niñas y adolescentes leerá un documento colectivo con un crudo diagnóstico de la situación y denuncias sobre "la degradación de las políticas" de niñez. El movimiento, integrado por personal de hospitales públicos, centros de atención primaria de la salud y el servicio de internación domiciliaria, señaló "graves situaciones" como la permanencia de niñas, niños y adolescentes internados más tiempo del requerido por su salud clínica integral debido "a la falta de  espacios pertinentes donde alojarlos y a la ausencia de intervenciones adecuadas". También indicaron que existen "situaciones de vulneración de derechos que se perpetúan y agravan con el tiempo no logrando el Estado interrumpir esa vulneración y lograr la reparación para esos niños y niñas". Entre otras críticas, señalaron "un marcado déficit respecto a recursos humanos, materiales y de infraestructura para asistir crisis y urgencias subjetivas en niños/as y adolescentes", en el ámbito de la salud mental, y aseguraron que existe "una revictimización más que una protección" en el abordaje de las medidas establecidas por la ley de infancia vigente. "Observamos intervenciones centradas en lo administrativo en detrimento de la escucha y la clínica del niño/a".

En la retahíla de denuncias, aseguran que "ante la detección de situaciones graves de vulneración de derechos, donde está en juego la vida, nos encontramos con que no están definidos los circuitos institucionales donde recurrir para la implementación efectiva de las Medidas de Protección Integral que marca la Ley. No existe el Servicio Local que hace años se intenta construir".

Los trabajadores lanzaron además una advertencia. "Los profesionales que atendemos a niños y niñas con vulneración de derechos en diferentes momentos e instancias ‑tanto en el territorio; en dispositivos alternativos; en atenciones ambulatorias y en hospitales‑ nos encontramos atravesando un proceso de agotamiento vinculado a los desmanejos institucionales en los que quedamos involucrados y que ponen en jaque la ética de nuestro trabajo".

El documento consensuado para leer hoy comienza: "Somos trabajadores pertenecientes a la Red de Salud Pública, que atendemos diariamente a niños/as y adolescentes de esta ciudad en hospitales públicos provinciales y municipales de tercer y segundo nivel de atención, como el Centenario, Provincial, de Niños Zona Norte, de Emergencias Clemente Alvarez, de Niños "Víctor J. Vilela", Roque Saenz Peña, Maternidad Martin, e ILAR, también en centros de Salud Provinciales y Municipales  del primer nivel de Atención y en el servicio de Internación Domiciliaria".

"Como Trabajadores y Profesionales de Salud somos testigos del impacto que la degradación de las políticas de Niñez. Esta situación se viene agravando, violando las leyes vigentes en Derechos Humanos, Niñez y Salud Mental, llegando a situaciones de violencia institucional donde es el mismo Estado quien vulnera los derechos de niñas y niños", continúan.

 

Se sienten a merced de "desmanejos institucionales" que les hace poner en crisis su ética de trabajo.

 

Y si decidieron intervenir en la audiencia de hoy con este pronunciamiento, es porque lo entienden como una obligación. "Tenemos el deber ético de hacer visible la falta de decisión gubernamental (municipal y provincial) para llevar adelante políticas públicas que generen una institucionalidad que proteja y garantice los derechos de la infancia en nuestra ciudad. Cotidianamente nuestro trabajo se ve afectado por cambios en las instituciones específicas de Niñez, así como por la fragmentación y desarticulación de las intervenciones que reproducen el abandono y la desprotección, principalmente en la población que vive en contexto de pobreza persistente y violencia urbana", afirman en el texto colectivo.

En cuanto a la prolongación de las internaciones, expresaron que se debe "a la falta de  espacios pertinentes donde alojarlos y a la ausencia de intervenciones adecuadas, lo cual tiene como consecuencia el deterioro de su salud mental, física y social". Esa prolongación sucede "por la falta de instituciones de alojamiento y además por la dilación de las decisiones e intervenciones de la Dirección de Provincial  de Promoción de Derechos de Niñas/os, Adolescentes y Familia". Además, alertan que "la incertidumbre con respecto a su porvenir ocasiona diversos impactos como la recurrencia de crisis subjetivas en los niños, niñas y adolescentes, reproduciendo violencia institucional y vulnerándose doblemente sus derechos". El movimiento de Trabajadores puntualizó además que "las situaciones mencionadas han sido planteadas oportunamente a la Defensoría de Niños, Niñas y Adolescentes".

Y recuerdan que "el alojamiento de un niño no es solamente un lugar físico, se trata de alojar a un sujeto infantil que ha padecido una separación temprana, situaciones traumáticas, que ha perdido sus vínculos. Se intenta propiciar un proyecto de vida que no reproduzca el desamparo del que ha sido víctima".

Igualmente grave es otra situación: la permanencia o retorno de niños y niñas que han sufrido situaciones de violencia y abandono al mismo lugar donde se produjeron, sin ninguna acción estatal de sanción o reparación. "En los diferentes niveles de atención de salud abordamos problemáticas de niños y niñas víctimas de  abandono, violencia familiar y/o de abusos sexuales. Frecuentemente ‑luego de las intervenciones de los organismos de protección‑ permanecen o vuelven al lugar donde fueron violentados/as sin que se sitúe una legalidad, o una sanción a los/as adultos/as que los/as vulneraron", señalaron los trabajadores. Así, "se los priva de un alojamiento, resguardo y asistencia que les corresponde. En el territorio esto sucede ante la dificultad da la Dirección Provincial de Niñez (DPPDNAyF) para agendar y resolver las situaciones detectadas por el primer nivel de atención, algunas de larga data. Observamos trayectorias de vida de niños/as en las que se realizaron intervenciones sin seguimiento por parte de estos organismos con consecuencias gravísimas e irreparables para su salud física y psíquica".