Un empleado de la Dirección de Niñez de la provincia fue condenado a 10 años de prisión efectiva por abuso sexual con acceso carnal agravado por tratarse de una menor que estaba bajo su guarda y 8 años de inhabilitación. Los hechos ocurrieron cuando la víctima tenía entre 12 y 13 años de edad y estuvo alojada en un centro transitorio dependiente del Ministerio de Desarrollo Social de Santa Fe. 

Los Jueces Leiva, Pérez Urrechu y Aliau condenaron a Daniel Augusto Apolo Cárdenas, quien era el acompañante personalizado de la víctima en el momento que la abusó. Se trata de un caso que tuvo fuerte repercusión en la opinión pública pero también dentro de los ámbitos institucionales por la gravedad de los hechos y por la demora en radicar la denuncia.

La Fiscalía había solicitado la pena única de 16 años de prisión efectiva bajo la figura de abuso sexual gravemente ultrajante, aunque en base a las pruebas que se desplegaron en las audiencias de juicio, el tribunal aplicó otra figura penal. "Habrá que esperar los fundamentos del fallo en los próximos días, algunas cosas nos llaman la atención. El tribunal consideró que correspondía la figura de abuso sexual con acceso carnal agravado", lo que significó una pena menor, explicó el Fiscal Ramiro González Raggio, de la Unidad de Delitos Contra la Integridad Sexual. 

La Fiscalía le atribuyó que entre 2015 y los meses de abril y junio de 2016, cumpliendo funciones como guarda en un centro de alojamiento transitorio conocido como la Pensión de la Música, que está bajo la órbita de la Dirección de Promoción de los Derechos de la Niñez, Adolescencia y Familia de la Segunda Circunscripción (Rosario), dependiente del Ministerio de Desarrollo Social de Santa Fe, abusó sexualmente de una una menor que tenía entre 12 y 13 años de edad. Los demás datos en relación a la mecánica de los hechos y la identidad de la víctima se reservaron para preservar a la víctima.

El caso salió a la luz en 2020, cuando la víctima ingresó a una dependencia de Niñez y vio en el lugar al ahora condenado. Entonces le reveló los abusos, lo que abrió las puertas para llevarlo a la Justicia.

La víctima informó a las autoridades lo ocurrido en noviembre de 2020, sin embargo la denuncia penal la presentó la ex delegada de Niñez en zona sur, Alejandra Fedele, recién en abril de 2021, después de verificar que la misma no se había concretado a pesar del tiempo transcurrido. 

En junio pasado, tras la detención, el acusado fue imputado y quedó en prisión en preventiva. Además, en esa audiencia el juez López Quintana, en función de la gravedad institucional de los hechos atribuidos al imputado y las evidencias aportadas por el fiscal en audiencia, resolvió poner en conocimiento del gobernador de la provincia la omisión de denunciar el caso por parte de funcionarios de jerarquía de la Dirección Provincial de Niñez. Hasta el momento no se conoció qué medidas se adoptaron desde el Poder Ejecutivo provincial al respecto.