Los ministros uruguayos de Relaciones Exteriores, Francisco Bustillo, y del Interior, Luis Alberto Heber, comparecieron este lunes ante el Senado por la concesión exprés de un pasaporte al narcotraficante Sebastián Marset, prófugo de la justicia paraguaya, en lo que la oposición denominó un "golpe a la reputación del país". Con antecedentes vinculados al narco y sospechoso de haber encargado dos asesinatos, incluido el del fiscal antimafia paraguayo Marcelo Pecci en mayo pasado, Marset está prófugo desde que en octubre de 2021 salió de Dubai, donde estaba detenido por portar documentación paraguaya falsa. El narcotraficante de 31 años fue finalmente liberado en Dubai luego de que el gobierno uruguayo le expidiera un pasaporte a distancia.

"Alcanzaba con una simple búsqueda en Google"

Convocados con apoyo de toda la Cámara por el senador Mario Bergara, del opositor Frente Amplio (FA), los ministros Bustillo y Heber fueron interrogados sobre cómo y por qué Marset recibió en Dubai el documento uruguayo. El gobierno de Lacalle Pou alega que en octubre pasado Marset no tenía pedido de captura por parte de Interpol ni causas abiertas en Uruguay.

"El episodio constituye un golpe a la reputación del país", dijo el senador Bergara durante la interpelación, y aclaró que no estaba juzgando la intencionalidad ni la connivencia de los funcionarios, aunque era "innegable que la expedición del pasaporte es parte de un proceso que le permitió a Marset salir de prisión, moverse con libertad y estar hoy fugitivo de la justicia internacional".

El senador del Frente Amplio aseguró que es difícil de explicar porque "alcanzaba con ver los resultados de una simple búsqueda en Google para saber quién era el uruguayo que con tanta prisa solicitaba un pasaporte desde una cárcel en los Emiratos Árabes Unidos". Sin embargo, Heber alegó que se actuó bajo el marco legal vigente y ajustado a derecho, ya que en octubre pasado Marset no tenía pedido de captura por parte de Interpol ni causas abiertas en Uruguay.

La defensa de los ministros

De hecho, las autoridades señalaron como responsable indirecto del hecho al gobierno de José "Pepe" Mujica, ya que en 2014 la administración frenteamplista flexibilizó en un decreto las condiciones para pedir un pasaporte desde el exterior. Desde entonces, al solicitante solo se le exige no tener antecedentes judiciales o causas abiertas en Uruguay, algo que Marset cumplía.

La requisitoria de Interpol se publicó el tres de marzo y no antes, sostuvo Heber, insistiendo en que se cumplió con el decreto. "La legislación es esa (...), que me parece una barbaridad, sí señor", aseguró el funcionario antes de asegurar que tienen previsto modificar la norma. Sin embargo, Bergara repitió varias veces que el decreto no obliga a expedir documentos y señala que ante circunstancias no previstas la decisión de otorgar un pasaporte uruguayo queda a consideración de los ministerios competentes. 

A su turno, Bustillo repasó la cronología de la gestión del pasaporte y aseguró que desde que Marset solicitó el documento hasta que se le expidió pasaron 33 días, intentando explicar que no se trató de un trámite exprés. "Esto fue un trámite administrativo más. En ningún momento tomamos conocimiento ni el ministro (Heber) ni quien habla. No corresponde que tenga conocimiento de cada trámite administrativo que sucede", dijo el canciller.

"Hay que contextualizar: en noviembre ¿quién sabía quien era Marset?", preguntó Bustillo. "Para nosotros era un futbolista uruguayo, de los tantos que hay en el mundo, detenido por usar un pasaporte falso", agregó el ministro de Relaciones Exteriores, asegurando que de esa manera fue presentado Marset ante los funcionarios del consulado uruguayo.

¿Quién es Marset?

Sebastián Marset, uruguayo de 31 años con largo historial delictivo en varios países y cuyo nombre aparece vinculado como presunto autor intelectual del asesinato en Colombia del fiscal antimafia paraguayo Marcelo Pecci, recibió un pasaporte de las autoridades uruguayas que le permitió escaparse de Emiratos Árabes Unidos. Según informó días atrás el diario uruguayo El Observador, el narcotraficante recibió el pasaporte mientras el ministerio del Interior colaboraba con la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos en una investigación internacional liderada por la Secretaría Antidrogas de Paraguay.

Marset fue señalado días atrás por el presidente de Colombia, Gustavo Petro, como responsable del asesinato del fiscal Pecci, quien fue ultimado por sicarios el 10 de mayo en una playa de Colombia. "La investigación demuestra que hace mucho el narco dejo de ser un problema bilateral colombo estadounidense y es hoy un problema americano y mundial", aseguró Petro en su cuenta de Twitter el viernes pasado.

La justicia colombiana condenó a 23 años de cárcel a cuatro asesinos confesos detenidos por el crimen, pero aún no determinó quiénes fueron los autores intelectuales del homicidio. Pecci, especializado en crimen organizado, narcotráfico, lavado de activos y financiamiento del terrorismo, había investigado a bandas de Brasil, además de lavadores de dinero libaneses de la Triple Frontera de Paraguay, Brasil y Argentina.