Alberto Fernández concurrió a primera hora de esta tarde al departamento de Cristina Kirchner. El mandatario y su vice habían hablado el jueves por la noche luego el atentado. Ese primer diálogo se produjo poco antes de que el Presidente grabara el mensaje que se difundió por cadena nacional, en el que destacó que el ataque a CFK es el hecho "más grave desde que hemos recuperado nuestra democracia" y anunció el feriado nacional de este viernes para posibilitar la masiva manifestación en defensa de la democracia que se desarrolla en todo el país.

La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner salió más tarde de su domicilio del barrio porteño de Recoleta, donde anoche fue víctima de un atentado, y saludó a militantes de diversas organizaciones sociales, políticas y estudiantiles y manifestantes autoconvocados que continuaban en la puerta del edificio para expresarle su apoyo y solidaridad.

Aún sin lograr salir de la conmoción por lo ocurrido anoche, alrededor de una treintena de personas aguardó esta tarde en la intersección de las calles Juncal y Uruguay para saludar a la exmandataria, quien salió de su casa pasadas las 16.20 con lentes de sol, saludó a algunos manifestantes y partió en automóvil sin que se informara cuál sería su destino.

El Presidente llegó a la casa de Cristina Kirchner en Recoleta poco después de las 14. Temprano el mandatario encabezó una reunión de Gabinete en la  Rosada, adonde convocó esta tarde a sindicalistas, empresarios y dirigentes de organismos de derechos humanos. Tras 45 minutos salió del domicilio de la vicepresidenta y se dirigió de nuevo a la Casa de Gobierno.

El Presidente y su vice también habían hablado el jueves antes del atentado. Fernández llamó a CFK a propósito de la campaña que se armó desde medios opositores sobre el supuesto crecimiento del patrimonio de ambos en el año 2021, que el mandatario respondió luego en una carta pública.

Fernández y CFK hablaron de ese tema, pero también de los riesgos que se estaban corriendo a raíz del discurso de odio especialmente lanzado por la oposición. El Presidente estaba al tanto de dos detenciones por amenazas a partir de investigaciones realizadas por el área de Cibercrimen de la Policía Federal. La inquietud aumentó cuando en los sitios analizados por los investigadores aparecieron fotos de los amenazados entrando o saliendo de sus domicilios.

Detrás del operativo de la Policía Federal Argentina, que se desplegaba a lo ancho de la calle Uruguay, aunque sin presencia de agentes de tránsito, los manifestantes expresaron su apoyo a la Vicepresidenta a través de cánticos, carteles y banderas de distintas organizaciones, provincias y de pueblos originarios.