La constructora brasilera Odebrecht, cuyos escándalos de corrupción en Brasil salpicaron a la primera línea del gobierno argentino y a la familia del presidente Mauricio Macri, fue suspendida “de modo preventivo” por un año del registro de compañías que pueden presentarse a licitación para obras públicas.

La medida fue oficializada en el Boletín Oficial a través de una resolución del Consejo del Registro Nacional de Constructores y Firmas Consultoras de Obras Públicas, que suspende el certificado de Capacidad de Contratación Anual para licitaciones que tenía la firma.

En rigor, el certificado estaba vencido "desde el 30 de junio de 2016" y lo que resolvió el Poder Ejecutivo fue no renovárselo en virtud de "la apertura de causas en el fuero federal y de investigaciones por parte del Ministerio Púbico Fiscal sobre las actividades del constructor".

El texto del organismo dependiente del Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda establece que la compañía propiedad de Norberto Odebrecht "no podrá participar en aquellos procesos de contratación en los cuales este Certificado resulta exigible" en los próximos 12 meses.

El “gigante de la construcción” se le atribuyó estar “'prima facie' en falta muy grave" por las condenas de corrupción de sus directivos en Brasil y que tienen también un capítulo en la Argentina.

Los dos casos más relevantes involucran Gustavo Arribas, amigo íntimo del presidente Macri y jefe de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) del gobierno de Cambiemos, y a Ángelo Calcaterra, primo del