El titular de la Procuración de Investigaciones Administrativas (PIA), Sergio Rodríguez, busca que la Corte Suprema reabra la causa contra el jefe de la AFI, Gustavo Arribas, acusado por el cambista brasileño Leonardo Meirelles ligado la empresa Odebrecht dijo haberle girado dinero. La presentación fue hecha ante la sala III de Casación, con la intención de que eleve el recurso a la Corte Suprema en forma directa.

Es por la causa que se abrió contra el jefe de los espías, luego de que Meirelles –uno de los arrepentidos que reveló en Brasil la trama de sobornos de Odebrecht– denunciara que le había hecho una serie de giros bancarios en el 2013, cuando se definía el soterramiento del ferrocarril Sarmiento. Arribas había sido sobreseído por el juez Rodolfo Canicoba Corral, en un fallo que fue ratificado por la sala I de la Cámara Federal a raíz de que el fiscal General Germán Moldes, tan activo en otras causas como la del fallecido Nisman, desistió de sostener la apelación para que se investigue al jefe de los espías.

Sin embargo, la PIA elevó el caso a Casación al validar su papel de procuraduría especial contra funcionarios públicos. Rodríguez es el fiscal designado por la Procuradora Alejandra Gils Carbó para coordinar todas las investigaciones contra funcionarios por el escándalo Odebrecht.

El 23 de junio pasado, el juez Juan Carlos Gemignani –al que se sumaron sus colegas Angela Ledesma y Eduardo Riggi– afirmó que “el encausado (Arribas) a la fecha de los hechos materia de investigación no había asumido función alguna en el ámbito de la administración pública”. En mayo, por videoconferencia y en otra causa Meirelles, cuyo testimonio fue clave en el escándalo del Lava Jato que salpica a la constructora brasileña Odebrecht en el pago de coimas en toda la región, aseguró que Arribas recibió 10 trasferencias de dinero por un monto de 850 mil dólares, y que le sonaba la empresa Iecsa, la constructora de la que Ángelo Calcaterra, primo del presidente Mauricio Macri, se desprendió hace un par de meses.