La fuerte presión del Gobierno nacional, sumada a las diferencias al interior del bloque de senadores del FpV-PJ y la reunión de gobernadores peronistas que se producirá hoy profundizaron el escenario de incertidumbre sobre el destino de la reforma electoral que impulsa el presidente Mauricio Macri. Tal como publicó PáginaI12 el domingo, la media sanción de Diputados agoniza en la Cámara alta y por estas horas se juegan las últimas cartas para intentar revivirla. En ese contexto, la bancada que conduce Miguel Pichetto mantuvo el martes por la noche una extensa reunión de la que salieron versiones contrapuestas. Desde el kirchnerismo duro afirmaron que el encuentro fue muy tenso (a punto tal de plantearse dudas sobre la unidad del bloque) y que un sector mayoritario de los senadores se mostró en contra de emitir dictamen de comisión el próximo martes, lo que le daría la estocada final a las intenciones reformistas de Cambiemos. Otros participantes del encuentro, en cambio, negaron que esté en juego la unidad de la bancada y le bajaron el tono al conflicto. Sin embargo, depositaron la suerte de la iniciativa en el mitín de gobernadores y senadores peronistas previsto para este mediodía.
  La reforma electoral, cuya atención quedó concentrada en la implementación de la Boleta Única Electrónica, corre contra reloj para llegar a implementarse en las legislativas de 2017, como pretende el Gobierno. Al tratarse de legislación electoral requiere mayorías especiales para su aprobación, lo que vuelve indispensable para Cambiemos el acompañamiento de al menos un sector del FpV-PJ. El bloque que preside Pichetto cuenta con mayoría propia (38   votos propios y 2 aliados). Hacia adentro conviven distintas posiciones. Sólo un sector muy pequeño, representado por el salteño Rodolfo Urtubey, está dispuesto a aprobar en el Senado el proyecto como vino de Diputados. En el otro extremo se ubica el kirchnerismo duro, con entre 8 y 12 senadores, que está abiertamente en contra de la reforma. Con este espacio coinciden tácticamente varios representantes de provincias como Formosa y Tucumán, cuyos gobernadores tampoco quieren saber nada con el voto electrónico. 
En medio se ubica un número importante de miembros de la bancada que tampoco tiene una postura homogénea. Senadores como Juan Manuel Abal Medina y Omar Perotti presentaron un proyecto propio de impresión de la boleta con conteo manual, mientras que otros plantean directamente la implementación “gradual” del sistema de Boleta Única Electrónica (BUE) propuesto por el macrismo. 
En ese contexto se produjo la reunión de bloque del martes por la noche en el despacho de Pichetto. El objetivo era plantear las distintas posturas de cara al encuentro que hoy mantendrán con los gobernadores. Según pudo reconstruir PáginaI12, el formoseño José Mayans fue uno de los que salió con mayor firmeza a cuestionar el proyecto oficial. El neuquino Marcelo Fuentes, presidente de la comisión cabecera del debate y uno de las principales referentes del kirchnerismo en el Senado, preguntó cuantos senadores consideraban “prudente, necesario y urgente” sacar despacho de comisión el próximo martes. Las voces a favor no habrían llegado a cinco. A su turno y con cierto fastidio, Pichetto elevó el tono de la discusión. Según la fuente que lo relate, se habría tratado simplemente de una manifestación más del temperamento habitual del rionegrino o de una advertencia que puso en duda la unidad de la bancada. El senador santiagueño Gerardo Zamora, en una postura intermedia, trató de terciar y sostuvo que el desafío del bloque debe ser mantener la unidad. 
 Sin una definición concreta más que la falta de consenso interno, la reunión finalizó después de tres horas. La cumbre de gobernadores de hoy terminará de pintar el panorama del principal bloque del Senado. De todas maneras, hay varios que ya avisaron que no serán de la partida. El salteño Juan Manuel Urtubey dijo que no cree “en las reuniones que buscan generar un voto uniforme”. “Cada uno de los actores debería hacerse cargo de lo que piensa y así evitar dilaciones que nunca quedan claras”, remató. Fuentes del Senado adelantaron que no asistiría tampoco el tucumano Juan Manzur, ni la santiagueña Claudia Ledesma.