Los dos gremios que nuclean a los docentes públicos y privados salieron ayer con los tapones de punta a rechazar la Circular N° 4 del gobierno provincial que cambia la forma de evaluación en el nivel secundario. Según sus propios términos, Sadop y Amsafe Rosario se unieron en “defensa de la educación secundaria” y anunciaron en una rueda de prensa conjunta una medida de fuerza para mañana. También un centenar de directivos de escuelas rechazaron las medidas de la Provincia.

“El alargamiento de las clases con todos los alumnos hasta el 23 de diciembre es absolutamente impensable, sumado a un régimen de evaluación y promoción que no respeta la normativa vigente, que no fue consultado con nadie y que aparece a fin de año de manera autoritaria por parte del Ministerio de Educación, es inconcebible”, dijo el secretario general de Amsafe Rosario, Juan Pablo Casiello.

Ante el rechazo generalizado, el dirigente adelantó que mañana a las 11 , frente al Ministerio de Educación realizaran una medida para “mostrar con mucha fuerza esta masividad del rechazo frente a la delegación”. “Hay mucho enojo, mucho malestar, así que estaremos desobligando a la escuela secundaria entre las 10 y las 14 para garantizar la masividad de todos los docentes”, señaló y cerró: “Estamos convencidos que la escuela secundaria atraviesa una crisis importante, que las medidas que viene tomando Adriana Cantero profundizan la crisis y que hay que aumentar la inversión, garantizando espacios para todos los chicos, y hablar en serio de cuáles son los cambios profundos que necesita el nivel”.

Por su parte, Martín Lucero, secretario general de Sadop dijo a este medio que “hay una clara resistencia de todos los sectores de la sociedad a esta normativa, que es básicamente la destrucción de la escuela secundaria. Te llevas una materia, juntan cuatro, haces un trabajo final integrador y eso es lo que el docente tiene que corregir. Es un atentado contra la profesionalidad del docente, una falta de respeto a la trayectoria de los alumnos, a la historia de la escuela de secundaria y solamente pasa en la provincia de Santa Fe. Las cosas más insólitas con la educación solo pasan en esta provincia" remarcó.

Y en esa línea agregó que “con esta disposición se excluye a todo el mundo, porque no da la posibilidad de que el alumno que tenga un buen rendimiento pueda mostrarlo. Se destruye, deja de haber parámetros, para todos lo mismo”.

Asimismo Lucero consideró que “la ministra busca dos cosas: hacer titulares diciendo que las clases van a durar hasta el 23 de diciembre y es mentira, ya que todo el mundo sabe que las escuelas no van a seguir hasta esa fecha, y lo segundo es hacer titulares diciendo que en Santa Fe no habrá repitencia, y es lógico, ya que pasan todos de año con un trabajo final que los docentes ni están de acuerdo en corregir”.

“En todo este contexto, se suma que el 1º de diciembre tenemos paritarias y más que medida de fuerza tenemos que pedirle al gobernador de la provincia, que es el máximo responsable, que escuche y se ajuste a la ciudadanía. No hay ningún sector que haya estado de acuerdo”, finalizó categórico. Además, Lucero remarcó que el 30 de noviembre los docentes tienen que presentar las notas de los alumnos y quienes aprobaron "deben continuar yendo para hacer talleres y otras actividades, teniendo que compartir el aula con aquellos que sí requieren de la recuperación de contenidos, esto es lo que repudian todos, los alumnos, los padres, los sindicatos, los dirigentes; nos parece una mala decisión".

"Cuando los padres se den cuenta que mandan los chicos a las escuelas para nada, se van a enojar peor. Hay que explicarle a las familias que si su hijo aprobó al 30 de noviembre, van a tener que ir igual, no para aprender, sino para estar, pero no le van a dar más clases", enfatizó el dirigente.

La impugnación también refiere a los criterios de evaluación -o no- de cada alumno porque no se fija, por ejemplo, qué se hace con un alumno que no quiere cumplir las tareas que se le asignan, pero está entre los que alcanzaron durante el año una "trayectoria sostenida".

En tanto, también un centenar de directores de escuelas rechazaron la modalidad de aprobación de materias sin examen. Y aseguraron que ninguno de ellos fue consultado.

En un comunicado remarcaron que “la ministra de Educación ratifica los términos de la circular 4 pero se olvida que en la circular 3 y en calendario escolar oficial emitidos con antelación por ella misma y que permite organizar planificadamente la 'vida escolar' proponía otra cosa totalmente diferente, sosteniéndose la acreditación de saberes por materia y preveía las mesas de examen para aquellos alumnos que no alcancen los saberes mínimos propuestos". Consideran que “la extensión de los ciclos lectivos es incoherente" con otras propuestas y preguntan "¿adónde quedan los 180 días de clases?, ¿adónde queda el vínculo pedagógico, ¿adónde quedan los procesos de aprendizajes?, ¿adónde queda la evaluación formativa?”.