Alejandro Grandinetti le pega por igual a Cambiemos y al Frente Progresista. A eso apuesta el diputado nacional en su afán de lograr que el massismo se instale definitivamente como la cuarta fuerza política en la provincia. Con el peronismo es más cuidadoso porque hay lazos para profundizar. En diálogo con Rosario/12, afirmó que la Nación aplica un "ajuste clásico" y que ciclo del socialismo en Rosario "está acabado". De recorrida por la provincia para acompañar a los candidatos de 1 Proyecto Santafesino, el ex periodista dijo que "es necesario plantear una alternativa sólida".

‑¿Cómo imagina la campaña que acaba de comenzar?

‑Va a ser una campaña dura, en términos nacionales, provincia de Buenos Aires, hemos notado una campaña bastante sucia, con mucha agresividad...

 

Será una campaña dura y bastante sucia. El gobierno viene demostrando una metodología tan agresiva que nos sorprendió.

 

‑¿De parte de quién?

‑Sobre todo de parte del gobierno, con una metodología que nos sorprendió. Pero nosotros tenemos en claro que vamos a hacer la misma campaña que intentamos en 2015, con propuestas claras. Hay dos ejes fundamentales sobre los cuales sabemos demostrar qué queremos, cómo hacerlo y ver resultados. Uno tiene que con el tema de seguridad, hemos apoyado e incentivado un paquete de leyes muy importantes, la extinción de dominio, imprescriptibilidad de los delitos de corrupción, la ley del arrepentido. Con respecto al tema económico, claramente fuimos impulsores de la reducción del pago de Ganancias para los trabajadores en blanco y hemos propuesto bajar los precios a través de dos medidas fundamentales, la eliminación del IVA para once productos básicos y la reducción del IVA para las tarifas que han crecido en forma indiscriminada. Creo que mucha gente se ha desilusionado con lo que ha propuesto Macri, fue un ajuste clásico, tradicional, como en la década del 80. Apuntamos a traer esa discusión a la provincia de Santa Fe.

‑¿Mejoró o empeoró la calidad de vida de los santafesinos en el último año?

‑Empeoró en toda la Argentina. Santa Fe, además, agrega ya un déficit que viene arrastrando desde el gobierno de Bonfatti, del propio Lifschitz, del tema de la inseguridad, y además en el contexto nacional con una sub representación. O sea, hoy el Frente Progresista se ha convertido en una expresión solamente santafesina, con una muy baja representación a nivel nacional. Son tan solo dos diputados al igual que nosotros y renuevan los dos, nosotros no renovamos. Seguramente nosotros vamos a tener más representación al final de este año que el propio socialismo. Eso habla a las claras de un proyecto que puede aportar poco a nivel nacional.

‑En los últimos días hubo un fuerte cruce entre el gobernador y el ministro Frigerio por la deuda de coparticipación de Nación para con Santa Fe, ¿cuál es su postura al respecto?

‑Nación tiene que pagar, pero también es cierto que hay una inacción clara del gobierno provincial.

 

Cuando se habla de grieta y fragmentación, nosotros somos capaces de agregar. Los únicos que estamos creciendo somos nosotros.

 

‑¿En qué sentido?

‑En todo. En obras de infraestructura, en una deuda social, hace 24 años que gobierna Rosario y el ideal socialista que siempre pregonó no se notó en una reducción concreta de asentamientos irregulares, de mejora en calidad de vida de los sectores más marginales. Si bien está bien, es cierto que el duplicar la tasa de homicidios en los últimos ocho años en Rosario, con la tasa más alta de homicidios en la ciudad de Santa Fe, habla también de una autocrítica que no vino de parte del socialismo.

‑¿El resultado de la elección de medio término puede reconfigurar el escenario político en la provincia?

-Está claro que hay un ciclo del socialismo que está acabado y que pudo mantenerse por la falta de visión y generosidad de los sectores de la oposición. No uniendo a cualquiera, pero sí es necesario que aquellos que tenemos una visión de recuperar el ascenso social como política de Estado, aquellos que creen en la industria, en una política productivista, los que representan a la clase media, a los laburantes... si no nos ponemos de acuerdo es por torpeza propia. En ese sentido, creo que somos la más clara alternativa del esquema de Macri a nivel nacional. Si nos ponemos de acuerdo en 2019 vamos a ser competitivos, sino va a ser bastante difícil.

‑¿Hay un sector del PJ que replica esos valores que usted pregona?

‑Hay muchos dirigentes del justicialismo que también creen que es necesario plantear una alternativa sólida, ojala podamos conseguirlo. Hay dirigentes de valía en otros lugares, nos hemos unido a la presidenta del Concejo radical (Daniela León), a Diego Giuliano que viene del peronismo, lo que nosotros estamos demostrando es que cuando se habla de grieta y fragmentación nosotros somos capaces de agregar. Los únicos que estamos creciendo y ampliando nuestra base de sustentación somos nosotros.