¿Cuántas veces el Estado puede fallar? ¿Cuántas personas miraron para otro lado? ¿Cuánta violencia soportó el cuerpo de Celeste Ríos? ¿Cuán dura se hizo su carne para sobrevivir a la intemperie? ¿Cuántas noches pasó frío y hambre? Son preguntas que nadie va a poder responder y así como no hay respuestas tampoco hay indignación por el peor final que le tocó vivir a Celeste, aunque la vida de las mujeres en situación de calle también importan.

A Celeste la asesinó su pareja en Constitución, el lugar más transitado de la Ciudad de Buenos Aires, eso no fue un impedimento. El femicida tuvo tiempo de efectuar 16 tortuosas puñaladas sobre su cuerpo, nadie estuvo para auxiliarla, el Estado tampoco. Una muerte evitable más y las cifras aumentan. Nos obligan a seguir contando muertas, a construir las cifras del horror, cada año, sin tregua, otra vez.

“Siento mucha impotencia, dolor, angustia. No sé cómo llamarlo. ¡Basta! ¡Era mi amiga loco! Yo hablaba con ella y lloraba”, escribió una amiga de Celeste, sus palabras fueron  publicadas en la cuenta de Instagram de la organización No tan Distintes (NTD), que trabaja con mujeres y LGBTI+ en situación de vulnerabilidad social. Celeste era compañera de muchas de las chicas de esa organización, con ella compartieron espacios de contención, como el Centro de Integración Frida, que NTD co-gestionaba en 2018.

El pasado sábado 28 de enero, el femicidio de Celeste solo fue noticia en el grupo de WhatsApp de NTD; los grandes diarios y la televisión no hablaron de ella. “Las personas que la conocían destacaban de Celeste la enorme capacidad de resistencia que tenía en medio de toda la adversidad de la calle, tenía mucha fuerza”, cuenta Daniela Camozzi, integrante de NDT y agrega: “Estamos muy conmovidas por este femicidio y por otro cercano de una compañera muy querida, María Laura Cejas, que no estaba en situación de calle pero sí era una militante histórica nuestra. Enero nos tiene absolutamente cruzadas por este tema y lo estamos abordando profundamente. Vemos que los femicidios de mujeres en situación de calle están totalmente invisibilizados, no debería sorprendernos que a las mujeres pobres, a las más rotas, no nos tengan en cuenta, que nos maten y no pase nada”.

No Tan Distintes es una organización social, política y transfeminista que nació en 2011 a partir de la iniciativa de personas que están o estuvieron en situación de calle, agotadxs de sufrir todo tipo de violencias y de encontrar sus derechos vulnerados. Su activismo se basa en el acompañamiento integral, la construcción de redes materiales y afectivas y el desarrollo de proyectos colectivos y autogestivos de vivienda, formación, trabajo y arte popular para lograr vidas vivibles y más justas para todxs.

Hoy son parte de la Asamblea Popular por los Derechos de las Personas en Situación de calle (PCC), que es una red de organizaciones desde donde desarrollan distintas acciones para abordar la violencia machista que sufren mujeres y LGBTI+ en situación de calle.

“El tema del conocimiento es lo que nos viene resonando desde ese sábado. Conocer nuestra red, tratar de evitar que se llegue a esa violencia tan extrema que es el femicidio. Tenemos una mirada interseccional para conocer cómo repercute la violencia de género en situación de calle. Entre todas estamos construyendo un camino para evitar los femicidios, tramando una red cada vez más fuerte. Una de las estrategias que pensamos es el insistir, ir al encuentro, llamar cuando se puede, estar en cuerpo presente, esa es una tarea que requiere mucha constancia y, a su vez, construir también con otras organizaciones”, explica Daniela.

Desde PCC están llevando adelante el Registro Unificado de Violencia, que aborda las distintas formas de violencias que sufren las personas en situación de calle, y desde donde también intentan registrar y visibilizar los femicidios y transfemicidios en situación de calle, contar esos casos que no son noticia, como el horror extremo que sufrió la mujer que fue prendida fuego en el bajo autopista de Virrey Cevallos, en 2020.

“Hicimos un mural con la Asamblea como una forma política de registro de las personas en situación de calle que nos permita salir un poco de la impotencia, también activamos todas nuestras redes para llegar a esas compañeras que últimamente no las hemos visto en nuestros espacios y salimos a buscarlas. Nosotras estamos todo el tiempo saliendo, yendo al encuentro pero, muchas veces, las compañeras quedan sometidas por varones muy violentos, las esconden, las meten en los pasillos de las villas. Estuvimos hablando mucho sobre qué hacer, y llegamos a la conclusión de que hay que insistir, estar presente. Es muy importante que estas compañeras puedan estar en contacto con las redes transfeministas de las que somos parte, porque es una manera de no quedar completamente aislada y en soledad, que es lo que pasa con la violencia machista”, señala.

Segun el último informe realizado por la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM), en 2021 el 20% de los femicidios contabilizados en la Ciudad de Buenos Aires fueron de mujeres que se encontraban en situación de calle.

“Vemos que hay un aumento de la cantidad de personas en situación de calle, esto es algo que venimos trabajando mucho en conjunto con las organizaciones que salen a recorrer los barrios. Estamos haciendo un trabajo político grande con talleres, casas colectivas y espacios de formación, teniendo en cuenta siempre la especificidad de la problemática de la situación de calle de mujeres y disidencias, que muchas veces tienen como estrategia ocultar esa múltiple vulnerabilidad que tienen al estar en la calle”, explica Daniela, y denuncia: “Sabemos muy bien que los números del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires son mentirosos y no brindan herramientas, somos las organizaciones las que salimos a construir los centros populares para saber exactamente cuántas compas hay en situación de calle, lo vamos construyendo comunitariamente desde las organizaciones sociales”.

NTD funciona en el barrio de Congreso, sobre la calle Uruguay 69, los días martes y jueves. Durante el mes de marzo dictarán un taller en el Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti para abordar la problemática de la violencia machista mientras hoy se preparan para visibilizar sus reclamos en las calles, el próximo 8 de marzo.