El senador Oscar Parrilli le pidió a la Secretaría de Energía que no prorrogue la concesión de las hidroeléctricas del Comahue que operan sobre los ríos de las provincias de Río Negro y Neuquén. Parrilli aseguró que es Enarsa quien debe hacerse cargo de las represas y que la futura administración se debe encarar en conjunto con las provincias poseedoras del recurso, sin impedir la probable participación del capital privado, asociado con el Estado.

En la carta enviada a la secretaria Flavia Royón, el senador del Frente de Todos afirma que “desde que se privatizaron las represas, la renta que han tenido los concesionarios no ha redundado en inversiones para el mejoramiento y expansión del sistema eléctrico. En consecuencia, la potencia instalada no ha aumentado, sino que se ha reducido del 43 al 25 por ciento de su participación en el sistema eléctrico argentino”.

“Es importante resaltar que las concesionarias han tenido abultadas ganancias durante todos los años de la concesión, que han transferido al exterior la mayor parte de las mismas y que, según los informes del Banco Central de la República Argentina, han sido parte de la extraordinaria fuga de divisas que tuvo el país durante los años 2016 a 2020”, agregó. 

El legislador neuquino sugirió “dar garantía y seguridad a los trabajadores de las represas y asegurar un efectivo traspaso de los mismos a la empresa Energía Argentina S.A, en los términos que contemplan los contratos de concesión y que la Secretaría considere”.

Parrilli ya presentó un proyecto de ley para que una vez finalizada la concesión de las represas del Comahue (AES Alicurá, ENEL El Chocón, Orazul Energy Cerros Colorados S.A., Piedra del Aguila Central Puerto S.A., Hidroeléctrica Futaleufú y Pichí Picún Leufú) la administración sea asumida por el Estado Nacional a través de Enarsa.