La de Leonardo Polti e Ignacio Santalla fue la primera pareja de hombres en la Argentina que tuvo un hijo mediante la “subrogación de vientre”. Sin embargo, desde el nacimiento de Juan Pablo, el 4 de junio de 2015, Leonardo no figura en el DNI del niño

En diálogo con AM750, Polti contó la historia: "Cuando nació Juan Pablo iniciamos la acción judicial para anular la partida de nacimiento y que figure en ella los nombres de los padres procreacionales, que somos Ignacio y yo”.

Y agregó: "En primera instancia tuvimos un fallo positivo, la jueza entendió esto y nos dijo que sí, pero la fiscal, junto a la defensora de menores, que nunca nos conocieron, apelaron diciendo que madre es la que pare”.

Leonardo explicó que luego se encontraron en casación con “tres jueces homofóbicos” que les dijeron en su fallo que “dos mujeres podían hacer ese tratamiento pero dos hombres no” y la única solución que les dieron fue que realizaran “una adopción integrativa”.

Además, el padre de Juan Pablo señaló el “problema legal” que enfrenta la amiga de la pareja que gestó el hijo en su vientre, para quien según la Justicia ahora tiene cuatro hijos. “Quiere volver a su vida normal, con sus tres hijos”, expresó.

En diciembre de 2020, el procurador fiscal, Víctor Abramovich, solicitó a la Corte Suprema de Justicia de la Nación que se concretara la inscripción como hijo de un matrimonio de dos padres, concebido mediante una donación de óvulos anónima y gestado en un vientre por sustitución.

El tema es que en menos de dos meses Juan Pablo cumple 8 años y otra vez vamos a tener que renovar el DNI a nombre de Ignacio (su pareja) y de mi amiga, y yo, después de 8 años de haber tenido a mi hijo, sigo sin ser su papá para la ley argentina”, sostuvo.

Por último, Leonardo pidió a los jueces de la Corte Suprema que “fallen cuanto antes” porque “Juan Pablo merece tener su identidad” y él “merece tener a su hijo a su nombre”.