Topate con Cocaine Bear, la película de Elizabeth Banks que divierte mucho a partir de una premisa simple y loca: un oso negro se encuentra un montón de cocaína descartada por traficantes, se la toma toda y se convierte en una amenaza para cualquiera que se adentre en el parque nacional. El resultado es una historia de terror gore, diurna y en paisajes naturales, que es también una comedia de humor negro rica, drogona y... adictiva.