El Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) sancionó a la empresa distribuidora de electricidad Edesur por incumplimientos en la atención a clientes, por lo que la concesionaria de la zona sur del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) deberá pagar 53 millones de pesos.

En este contexto, el interventor del organismo regulador, Walter Martello, contó que iniciaron el proceso "dando el derecho a descargo y cumplimentando todos los pasos administrativos que corresponden".

"Acabamos de firmar una serie de multas: 52 millones de pesos por mala atención al usuario y 132 millones en una multa extraordinaria porque es una devolución al usuario conforme a lo que establece nuestra recaudación que le llegará en 45 días", afirmó en diálogo con AM750.

Martello explicó que esta multa "obedece al evento del 12 de diciembre" y que todavía faltan las acciones para el evento "que más sufrieron los usuarios" en el mes de marzo.

De esta manera, "el monto que va a recibir el usuario va a depender de la cantidad de horas que estuvo sin suministro y de la comprobación que esa situación ocurrió, ya sea porque reclamó a Edesur o al ENRE", agregó.

Por otra parte, señaló que el grupo accionario mayoritario de Edesur (Grupo ENEL) se va del país y saca a la venta, a través del Banco Santander, el 71% de sus acciones, aunque a la empresa todavía queda una concesión de 60 años más.

En este sentido, para el interventor del ENRE, "el Estado debería comprar parte de esas acciones para ser parte de la empresa".

La compañía fue intervenida por el Estado nacional, con Jorge Ferraresi como interventor, por la deficiente prestación del servicio y tras los reiterados cortes de luz que afectaron a millones de personas de la ciudad de Buenos Aires y alrededores este último verano, uno de los más calurosos de la historia.

El directorio entero de Edesur fue denunciado penalmente por malversación, fraude en perjuicio de la administración pública y abandono de persona. Mientras, la distribuidora permanecerá intervenida durante 180 días, con el fin de revertir lo que el ENRE califica como “incumplimiento doloso de las obligaciones” por parte de la firma.