En San Pablo, el gobernador de la Provincia de Buenos Aires encabezó la inauguración del stand argentino en Automec, una de las ferias automotrices más importantes de mundo. Allí, 26 de las 57 empresas nacionales que expusieron sus productos son de origen bonaerense. Kicillof subrayó la necesidad de "sostener una orientación y un modelo industrial y productivo dentro de la región".
Dedicado a los sectores de reposición y reparación de vehículos livianos, pesados y comerciales, la feria Automec es respaldada desde hace quince años por las asociaciones líderes de la industria, ya que oficia como exposición de los lanzamientos de las principales marcas de todo el mundo. “Además de ser una exposición muy importante, esta feria es un verdadero centro de negocios en el que muchos empresarios bonaerenses y argentinos están realizando ventas que les permiten vincularse con un mercado tan importante como es el brasileño”, señaló Kicillof.
El año pasado, en la feria Automec hubo 1380 expositores y se registraron más de 65.000 visitantes provenientes de distintos puntos del globo. Esta vez, el pabellón de exposiciones Argentina se extenderá a lo largo de 368 metros cuadrados, en los que la Provincia de Buenos Aires contará con 26 firmas comerciales que participarán del evento que se extiende hasta el sábado 29 de abril.
"Automec es una feria muy representativa para América Latina, ya que es un muy buen punto de encuentro para coincidir con futuros clientes de una gran parte del mundo", dice Arcoraci al comenzar", dijo a este diario Marín Arcoraci, dueño de Autopartes Rigiflex, de Tres de Febrero. "A nosotros, los bonaerenses, esta feria nos genera las expectativas de incursionar en nuevos mercados. Exponer en Automec nos posibilita el beneficio de seguir abriendo mercados, adquiriendo nuevas experiencias". Es su cuarta vez en Automec. "Así nos afianzamos como marca", señaló.
Arcoraci dijo que "es importante que Kicillof haya venido, para que pueda vincularse con nosotros, ver lo que hacemos y pensar siempre de seguir avanzando y produciendo para nuestro pais".
Siempre acompañado por el embajador Daniel Scioli, Kicillof dijo, en un encuentro con la delegación empresaria, que “26 de las 57 empresas argentinas que se presentaron en la feria son bonaerenses, lo que demuestra una vez más la importancia de la provincia de Buenos Aires en el tejido industrial de nuestro país. Conversando con las empresarias y los empresarios, muchos de ellos pymes, coincidimos en la necesidad de sostener una orientación y un modelo industrial y productivo”.
Tras un encuentro con el presidente de la Federación de Industriales de San Pablo (Fiesp), Josué Gomes da Silva, dijo el gobernador que "este acompañamiento a la industria solo es posible con un Estado presente, que apuntale a las empresas y articule con un socio estratégico como Brasil las políticas de integración productiva necesarias, pensando en grande y en el largo plazo".
Luego de la inauguración del stand argentino en la Feria Automec 2023, dijo Scioli: "Brasil tiene toda la voluntad de ayudarnos, lo veo en cada encuentro que tengo con todas las autoridades, estamos trabajando en la integración financiera con Brasil". Le agradeció a Kicillof "el acompañamiento a los empresarios de este sector tan pujante en la economía provincial que hoy están participando en la feria más grande de autopartes en Latinoamérica”.
“El desarrollo de la industria automotriz implica integrar cada vez más al autopartismo nacional, y eso es más trabajo argentino y más divisas para el país. Eso es lo que se discute este año: la producción, el trabajo y la industria argentina”, señaló Scioli, tras afirmar que las relaciones de integración con el país vecinos "generarán proyectos para el crecimiento económico, entre ellos el gasoducto Néstor Kirchner, que llevará gas hasta el estado de Rio Grande do Sul desde el yacimiento de Vaca Muerta, en Neuquén".
Entre los empresarios menudearon las lecturas en clave electoral, porque los dos son precandidatos, Scioli a la presidencia y Kicillof a la gobernación.
Luego de señalar que la decisión de Alberto Fernández de no ir por la reelección "allanó el camino", el gobernador remarcó: "Nosotros desde la provincia de Buenos Aires, para dar esta disputa y esta discusión, necesitamos también tener una estrategia nacional que englobe a la provincia", señaló, tras asegurar que "está dispuesto" a ir por su segundo mandato en Buenos Aires.
Sobre el acto de Cristina Kirchner el jueves 27 en La Plata, dijo el gobernador que "hay amplios sectores que obviamente reconocen la representatividad que tiene Cristina y que quieren su candidatura, y por supuesto la vamos a escuchar a ella, que es la que conduce, además de ser posible candidata, la de mayor intención de voto".
Automotrices
Argentina y Brasil son dos de los paises que se posicionan como los principales productores mundiales de vehículos, ubicándose por detrás de China, Estados Unidos, Japón, Alemania, Corea del Sur, India y México. Brasil es el principal productor de vehículos del MERCOSUR, ya que representó entre 1999 y 2018 el 84,3% de la producción de vehículos del bloque y el 3,5% de la producción mundial. En este período, produjo en total 52,4 millones de unidades. Argentina es el segundo productor sudamericano. Promedió un 15,3% de la producción total del bloque y el 0,64% de la producción mundial en el período 1999-2018, cuando produjo en total 476,6 mil vehículos por año.
En la Argentina, el sector automotriz este genera el 6,8% del Producto industrial. En Brasil, genera el 22%. El rubro es fuente de empleos formales con niveles de salarios e ingresos superiores al de otras franjas.
En la región, la industria automotriz data de principios del siglo XX y dio un salto bajo los gobiernos de Juan Domingo Perón y Getulio Vargas, para transnacionalizarse despues. Los capitales extranjeros dominaron las diversas ramas del valor agregado en la fabricación de motores y neumáticos. A su vez, la producción de autopartes que estaba en manos de empresas dedicadas a los repuestos y accesorios, las carrocerías, la reparación y la rectificación de motores, también pasaron a concentrarse en manos de capitales extranjeros.
Ya con la coordinación binacional, desde mediados de los '80 el sector automotriz argentino acudió a las estrategias de integración junto a Brasil.
Sin embargo la historia posterior mostró una caída de la producción y una reducción de los niveles de integración nacional. Esto pudo palparse especialmente en el sector autopartista, víctima principal de la desintegración que lo posicionó como dependiente de los componentes importados. Las que más sufrieron fueron las pequeñas y medianas empresas.
Según un informe de la Unión Industrial Argentina, entre 1999 y 2003 la producción de vehículos creció levemente a un ritmo del 1,7% anual. Entre 2004 y 2008, en paralelo al ciclo de expansión de la economía, la producción de vehículos se expandió a un ritmo promedio del 29,5% por año. En el período 2009-2013, la producción de vehículos se desaceleró pero continuó creciendo a tasas elevadas del 7,4%. Finalmente, entre 2014 y 2018 la producción se desplomó y cayó a un ritmo promedio del -9,6% anual. En Junio de 2019, la producción automotriz mostró una caída del 39,3% interanual. La producción de los primeros seis meses del año contabilizó 162.200 unidades y fue un 33,6% más baja que en el mismo período del año 2018.
En 2019 y tras las PASO de aquel año, Brasil y Argentina postergaron hasta 2029 la implementación del libre mercado automotor. Ese convenio, firmado por el ministro de Economía brasileño, Paulo Guedes, y el titular del Ministerio de Producción argentino, Dante Sica, reemplazó al pacto automotor firmado en 2016 y que estaba en vigencia hasta ese entonces, el cual preveía la liberación del comercio de vehículos y autopartes entre ambos países a partir de julio de 2020. El acuerdo establecido en el ocaso del gobierno macrista, dispuso modificaciones del régimen flexible que había sido acordado tres años antes.
Para julio de 2022, Argentina y Brasil firmaron un Acuerdo de Reconocimiento Mutuo (ARM) de Homologaciones Vehiculares, el cual promovía la facilitación del comercio bilateral de vehículos entre los países en cuestión, reduciendo costos y plazos. "El reconocimiento mutuo de homologaciones vehiculares favorece el desarrollo del sector automotor en los dos países y el incremento de los flujos de comercio, además de otorgar más previsibilidad y seguridad jurídica para las inversiones", habían indicado desde el Ministerio de Relaciones Exteriores. En aquel entonces, el acuerdo establecido buscó reforzar el interés de Argentina y Brasil en profundizar la integración productiva en la industria automotriz regional y mejorar los niveles de competitividad, calidad y seguridad vehicular.
