El presidente Alberto Fernández activó la campaña del Frente de Todos, tras la decisión de Cristina Kirchner de confirmar que no será candidata, con un llamado a la unidad al pedir dejar las discusiones internas de lado "porque el problema está con los otros" y apuntar contra las promesas de campaña de Juntos por el Cambio y Milei: "No nos equivoquemos, los que dicen tener el remedio son los que trajeron la enfermedad". Además, el mandatario hizo una defensa de su gestión y del acuerdo con en el FMI: "Se puede negociar con las reglas ortodoxas que propone el Fondo o se puede negociar como lo hacemos nosotros". 

Fernández dio su primer discurso público después de la carta de Cristina Kirchner durante la "Expo Banco Nación Conecta" en Técnópolis, donde cerró con una arenga hacia el interior del Frente de Todos para concentrarse en la campaña electoral y apuntar contra las políticas propuestas por la oposición. 

"La discusión del presente es una discusión de la economía, pero también una discusión del modelo de país que queremos construir: es un modelo más justo el que proponemos nosotros, es un país para pocos el que proponen ellos", advirtió y repitió ante el auditorio: "No nos equivoquemos". 

El jefe de Estado, acompañado por el jefe de Gabinete y posible candidato Agustín Rossi, dedicó primero algunos dardos a los ejes de campaña de Juntos por el Cambio al recordar que "los que nos dicen a nosotros cómo arreglar el problema de la deuda y el déficit" son quienes apoyaron y formaron parte de la administración de Mauricio Macri para endeudar al país con el Fondo Monetario Internacional (FMI) . 

Alberto contra Macri: "Ningún amigo mío hizo negocios"

En ese tono, Alberto apuntó directo contra el líder del PRO al señalar que fue durante su gestión que "hicieron negocios con sus primos y sus amigos". "Yo me voy con la tranquilidad de que ningún amigo mío hizo negocios, ningún hermano mío se volvió millonario porque fui Presidente. Me voy con lo mismo que llegué. No se equivoquen por favor", insistió. 

El mandatario aprovechó el marco de la actividad del Banco Nación para destacar que hay que mantener la defensa de la banca pública frente a los que "cada dos por tres, nos vienen a decir que la solución es privatizarla". "La banca pública es central para el desarrollo de un país, porque muchos no pueden acceder al crédito con la banca privada y el Estado, con una esfuerzo y tasas subsidias, se los da a los que quieren producir y crecer". "Dejen de mentirle a los argentinos", le apuntó a la oposición y recordó que la gestión macrista, con otro modelo, tuvo "en rojo tres años el Banco Nación". 

"Son los que más defienden al sistema"

El Presidente también se encargó de alertar sobre el programa de gobierno propuesto por Javie Milei: "Los que dicen ser el antisistema son los que más defienden el sistema. Los que dicen que hay que tirar abajo el Banco Central, que hay que dolarizar la economía, que hay que privatizar las calles y terminar con la escuela pública porque es un sistema de adoctrinamiento, esos son los que más defienden el sistema injusto que existe en el mundo actual".  

Acuerdo con el FMI

Alberto abrió su intervención repasando su gestión y, en particular, el acuerdo con el FMI, en lo que pareció ser un intercambio con la vicepresidenta Cristina Kircher, quien en su carta de ayer volvió a criticar las recetas del organismo multilateral de crédito.

El mandatario empezó por condenar la deuda heredada por el gobierno de Macri e indicó que la discusión con el FMI tuvo como premisa el concepto de "sostenibilidad de la deuda", por lo que se consiguió el respaldo para acordar una quita de 30 mil millones de dólares con los acreedores privados.  

En cuanto a la extendida discusión sobre la renegociación con el FMI, Alberto defendió la "necesidad de negociar" con el organismos para no sufrir problemas de restricción al crédito de organismos como el Banco Mundial y la CAF, y también señaló la imposibilidad de realizar acuerdo como el swap con China, algo que destacó como "salir de la irracionalidad de no discutir la deuda". 

"La discusión es cómo se negocia. Se puede negociar con las reglas ortodoxas que propone el Fondo o se puede negociar como nosotros, no lo hicimos así. Hoy Sergio (Massa) no está negociando así", defendió el presidente la gestión actual y la del ex ministro Martín Guzmán. Y destacó las cláusulas puestas en la primera renegociación que permitieron modificar las metas de reservas frente a circunstancias ajenas al país como lo fue la sequía, agravada por el cambio climático. 

"Aunque tengamos que asumir la deuda y discutir con el Fondo, no somos complacientes", aseguró Fernández y señaló que "siempre el horizonte fue claro: producción y trabajo".

"Tenemos mucho para decir de lo mucho que hicimos en un contexto absolutamente desfavorable"

Alberto destacó estar fuera de la contienda electoral y dedicado a la presidencia, pero utilizó el escenario en Técnopolis par reinvidicar su gestión y la del Frente de Todos. El mandatario recordó que Argentina durante la pandemia de Covid-19 inició su programa de vacunación a la par de los potencias económicas y resultó ser "el país con mayor nivel de inmunidad, entres los países de más de 30 millones de habitantes".

Además, señaló que, gracias a esa política sanitaria, la industria pudo reactivarse rápidamente y marcó un crecimiento de 16 por ciento el año pasado. "Antes de mi llegada al gobierno 23 mil pymes habían cerrado, hoy tenemos 30 mil funcionando. Cuando llegué, la desocupación era del 12 por ciento y hoy es menos del 6 por ciento", comparó el jefe de Estado, quien agregó que el empelo registrado sigue creciendo y 21 provincias tienen una tasa de desempleo por debajo del 3 por ciento. "Desafío a caulquier a que venga a negar lo que estoy diciendo", apuntó. 

El Presidente enumeró la pandemia, la guerra entre Rusia y Ucrania y la sequía como hitos que atentaron contra la situación social y económica del país, pero consideró: "Soportamos muchos adversidades, muchas más de lo que pudimos prever, sin embargo, frente a cada problema le pusimos el pecho y salimos adelante pensando en los que producen y trabajan".

Alberto reconoció que termina su gestión con "muchos problemas que resolver" como la inflación y la pérdida de poder adquisitivo, pero sostuvo que "estos desafíos no los tendríamos sin hacer todo esto que hicimos". "Hay un millón de argentinos que el salario no les permite llegar a fin de mes, pero cuando llegamos no tenían trabajo. Hay otro millón trabajando en la informalidad, que con el auxilio del Estado y las changas no llegan a fin de mes, pero no tenían trabajo hace 4 años", contrapuso.  

"Tenemos mucho para decir de lo mucho que hicimos en un contexto absolutamente desfavorable", valoró sobre los cuatro años de gestión.