El domingo 28 de mayo fue el día en el que la batalla por Waystar Royco llegó a su final, cuando la aclamada serie Succession emitió el décimo episodio de su cuarta temporada y tuvo un desenlace que dejó a los espectadores de la multipremiada ficción de HBO con la boca abierta.

Y para no sentir tanto el vacío, a continuación recomendamos otros productos televisivos que, si bien no llegan al nivel de la serie creada por el guionista y productor inglés Jesse Armstrong, tienen similitudes con los climas y las último éxito de la ficción.

Game of Thrones

A esta altura parece casi imposible que alguien no haya visto la otra serie de HBO que iguala en popularidad a Succession. Sin embargo, para quienes todavía no se animaron o no tuvieron oportunidad de sentarse a ver las ocho temporadas, la guerra por el Trono de Hierro es tan apasionante como la de los magnates multimillonarios, perro con un tinte realista que va acabando en una epopeya fantástica, sin dejar de lado las traiciones, alianzas, y guerras encarnizadas.

The Sopranos

Otra joya de HBO. El propio Matthew Macfadyen (Tom Wambsgans en Succcession) afirmó en una entrevista que la serie de gangsters tenía muchos puntos en común con la de la familia Roy.

James Gandolfini se destaca como el jefe de la mafia Tony Soprano, en una trama que sigue al patriarca en su lucha por equilibrar su vida personal con su liderazgo al frente del crimen organizado.

House of Cards

Si hablamos de traiciones y enredos palaciegos, qué mejor que una de las series insignia de Netflix. A pesar de los escándalos en la vida real de su protagonista, Kevin Spacey, la serie es un documento del legado de su personaje, Frank Underwood, un funcionario que, al ser traicionado por el presidente de los Estados Unidos, decide comenzar una carrera para llegar él mismo a la Casa Blanca sin importar a quién tenga que pisotear, figurativa y literalmente.

The Newsroom

Ysi por alguna razón alguien se quedó con ganas de saber cuáles eran los entretelones de la cadena de televisión ATN en Succession, esta serie puede darnos un panorama bastante cercano, además de un retrato casi fidedigno de los medios de comunicación actuales.

El legendario Jeff Daniels interpreta a un periodista y presentador de noticias. A la vuelta de sus vacaciones, después de un revés profesional, se encuentra con que muchos de sus compañeros han pedido el traslado. Además, su jefe (Sam Waterston) contrató como productora ejecutiva a su exnovia, Mackenzie McHale (Emily Mortimer), quien trae consigo cambios que le generan más de un dolor de cabeza. Durante el desarrollo de la trama se incluyen coberturas de hechos reales para hacer la historia más creíble.