El Ministerio de Trabajo de la Nación prorrogó por otros 10 días hábiles (hasta el 13 de junio próximo) el período de conciliación obligatoria a partir de la medianoche de hoy en el conflicto que por reclamos salariales mantienen la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y las cámaras empresarias de la actividad. La determinación laboral, adoptada sobre el filo del vencimiento de la Ley 14.786 de conciliación, fue acatada por el gremio, que levantó el paro previsto para este martes.

Con esta decisión, se aleja el fantasma de la huelga en los colectivos locales, pero prevalece el clima de malestar e incertidumbre en relación al pedido de recomposición salarial planteado por los choferes y que las patronales aducen su imposibilidad de cumplir, merced a que Nación no habilita más subsidios para cubrir esta pretensión laboral.

En la audiencia que se llevó adelante entre todas las partes, el Ministerio de Trabajo y las cámaras empresarias del sector no llegaron a un acuerdo con la Unión Tranviarios Automotor (UTA), por lo que las autoridades nacionales extendieron por otros 10 días hábiles la conciliación obligatoria para evitar el paro de colectivos que estaba prevista para este martes.

Los choferes piden una actualización salarial pero los empresarios aseguran que “es imposible” ante el aumento de los costos, la tarifa atrasada y los subsidios nacionales que llegan a destiempo y son muy inferiores a los solicitados.

Más temprano, antes de una nueva audiencia entre el gremio y los empresarios en Buenos Aires y de conocerse la determinación del Ministerio de Trabajo, el secretario general de la UTA Rosario, Sergio Copello, señaló: “Nosotros estamos expectantes porque la negociación se lleva a cabo en Capital Federal por lo que se complica saber qué va a pasar. Entiendo que si no hay un acuerdo vamos a ir a una medida de fuerza”.

Según analizó el dirigente, si el aumento salarial que reclaman desde el gremio depende de los recursos nacionales, “creo que estamos más cerca de un conflicto”. De todos modos, advirtió que, si no alcanzaban un acuerdo este lunes, el Ministerio de Trabajo estaba en sus facultades de extender por otras dos semanas la conciliación obligatoria, algo que finalmente ocurrió en horas de la tarde.

Consultado sobre la situación local y la posibilidad de que se vuelva a demorar el pago de sueldos, el secretario de la UTA remarcó en Radio 2 que estaría encaminado el arribo de los subsidios nacionales que se le adeudan a la provincia por lo que “no habría conflicto por el cobro de salarios”.

Por su parte la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), reconoció que los salarios de los choferes perdieron ante la inflación, pero señaló que para conceder la mejora reclamada necesitan un ingreso de 6.216 millones de pesos extra por mes.

Según estiman desde AAETA, este monto implicaría "unos 25 pesos por viaje" que deberían sumarse a la tarifa o compensarse con subsidios, ya que cada actualización en el precio del boleto desde marzo de 2023 fue descontada de las transferencias del Estado a las empresas.

Por su parte, la Federación Argentina de Trasportadores por Automotor de Pasajeros (Fatap) agregó que "los incrementos que sufren los salarios, el combustible, los repuestos y los bienes de capital (...) deben encontrar adecuada cobertura en alguna de las dos fuentes de ingresos indicadas (tarifas o subsidios)".

Además, las firmas transportistas reprochan a las autoridades nacionales que por la quita de subsidios no es posible cumplir con la renovación de parque automotor para "garantizar la seguridad de los viajes".