El dólar quedó en el rango de los 1430 o 1440 pesos. La semana pasada bajó más aún y después volvió a subir. Se quedó rengueando en un nivel más alto del que uno imaginaría quizás si el Gobierno tiene en la cabeza sostener el esquema anterior”, explicó el economista Hernán Letcher al analizar la coyuntura cambiaria en la 750.

Según el director del CEPA, el mercado se mantiene expectante ante las señales del Ejecutivo: “El mercado está viendo ‘qué onda’. Estamos en un escenario donde se recrea el carry trade, pero ¿a qué dólar? ¿En 1400 o 1500? Porque si arranca en 1400 y termina en 1500, ya perdí todo el carry”.

Letcher destacó además que el propio Gobierno reconoció ante organismos internacionales un cambio de enfoque en su política monetaria: “En la última semana hubo un documento que presentaron en Washington donde el Gobierno sostiene que hubo en la previa de la elección una desmonetización importante de la economía y por lo tanto tienen margen para remonetizarla. Eso explica la reducción de los encajes bancarios”.

Esa decisión, según el economista, será clave para determinar la política cambiaria de los próximos meses: “Desarmar los encajes va a determinar en qué tipo de cambio se siente cómodo el Gobierno, y evidentemente el mercado está mirando esta cuestión. Hasta el viernes había mucha tensión cambiaria, ahora hay menos, pero todavía no está claro cuál es la hoja de ruta”.

Letcher detalló que la estrategia oficial se sostiene en un supuesto equilibrio que parece difícil de alcanzar: “Se supone que se van a bajar las tasas y, con el tipo de cambio controlado, bajaría la inflación. Eso reactivaría el crédito y, con la reactivación del crédito, se debería generar mayor producción, y con eso mayor empleo y mejores salarios”. 

Sin embargo, advirtió que “estrictamente es la misma hoja de ruta que tenían el año pasado”, aunque ahora “el deterioro económico genera dificultades para retomar ese camino”.

¿Habrá un revival económico del menemismo?

Consultado sobre la posibilidad de un “revival” de la economía del menemismo y la convertibilidad en la etapa final del gobierno de Milei, Letcher consideró que “muy probablemente se recree el escenario de los ‘90, con una característica que empezamos a ver en la primera parte de esta gestión: dos velocidades en el consumo”.

“La diferencia es que el nivel salarial es más bajo. Si en los 90 tenías trabajo registrado y privado te ibas a Miami, hoy no va a pasar eso aunque se estabilice. El problema es que hay un 50% de la gente que se endeuda o usa ahorros para llegar a fin de mes, un 30% que solo llega, y apenas un 20% que puede ahorrar”, aclaró.

Letcher remarcó que, a diferencia de los años noventa, la estructura de ingresos actuales impide que el crédito tenga un impacto expansivo: “El crédito, que en los 90 lo podía sacar una mayor cantidad de gente para el consumo de un bien durable, hoy no puede tomar el dinamismo necesario para reactivar la economía”.

El economista también se refirió a los cambios en el mundo laboral y a la falta de debate sobre los nuevos formatos de empleo: “La discusión salarial de los asalariados ayuda a los no registrados, los datos muestran eso. Pero hay una falencia de discutir cómo se resuelve y cómo se encara la problemática de las nuevas realidades laborales”.

En ese sentido, describió cómo se desdibujaron los límites del trabajo y la vida personal: “Hace unos años uno más o menos defendía las ocho horas de trabajo; ahora te manda un mensajito tu jefe a las doce de la noche y obvio que le vas a contestar. Eso hay que adecuarlo, pero no con la intencionalidad manifiesta de masacrar al trabajador como pretende este Gobierno”.