Con esta incorporación, Pampa sigue diversificando su presencia en el sector energético y refuerza su apuesta al desarrollo de Vaca Muerta. Con la adquisición de este 45% restante, la compañía aumenta su exposición en el segmento del petróleo no convencional, en un bloque con un gran potencial productivo.

Rincón de Aranda tiene una concesión para la explotación convencional de hidrocarburos, sobre la que se solicitará su reconversión a una Concesión de Explotación No Convencional de Hidrocarburos. Actualmente, Pampa y Total se encuentran asociados en este bloque y luego de esta operación, Pampa tendrá el 100% de los derechos sobre el área, lo que le permitirá incrementar tanto sus reservas como su producción de crudo.

Desde 2018, Pampa desarrolló y adquirió parques eólicos por un total de 387 MW. A pesar de la disminución de potencia eólica que se da con esta venta, la compañía se encuentra desarrollando las dos primeras etapas del Parque Eólico Pampa Energía VI que permitirán en el corto plazo, que la compañía sume 140 MW, alcanzando una potencia total de 427 MW. De esta manera, las inversiones realizadas en el sector renovable suman más de US$1.000 millones de dólares.

Pampa es el tercer productor de gas de la cuenca neuquina, tiene una participación equivalente al 8% de la superficie de Vaca Muerta, y completará inversiones por más de 1.100 millones de dólares en el período 2021-2023 para ampliar su capacidad de producción de gas y de petróleo.