LA LEYENDA REGRESA - 8 puntos

Old Henry - Estados Unidos, 2021

Dirección y guion: Potsy Ponciroli.

Duración: 99 minutos.

Intérpretes: Tim Blake Nelson, Scott Haze, Gavin Lewis, Trace Adkins, Stephen Dorff.

Disponible en Netflix.

Como suele decirse, el western está muerto y enterrado, pero cada tanto resucita y vacía un par de cargadores. La leyenda regresa, que sorprendentemente se ha transformado en una de las películas más vistas en Netflix durante estos últimos días, es un perfecto ejemplo de lo antedicho. Presentado en sociedad hace casi dos años en el Festival de Venecia, el segundo largometraje del director Potsy Ponciroli no sólo trae de entre los muertos al gran género cinematográfico estadounidense sino que lo hace con las mejores armas del clasicismo bien entendido.

Eso queda claro durante la secuencia que abre el film, que utiliza la enormidad de los paisajes –y la pequeñez del ser humano en ámbitos salvajes– para narrar la caza del hombre por el hombre. Pero Old Henry (el título original es mucho mejor que la “traducción” al español) es también un western de interiores, de tensiones a puertas cerradas, de encierros literales y simbólicos, de acechos y asedios.

En apariencia, todo gira alrededor de un fajo de billetes robados en algún lugar, y de cómo un trío de agentes de la ley –ahí está la estrella, oronda, clavada en el pecho– intenta dar con el paradero de un ladrón al escape. Pero de apariencias va la cosa, y cuando un extraño malherido termina en el rancho de Henry, un granjero de cierta edad que convive con su hijo adolescente, la confesión invierte la carga de las sospechas: el ejecutor del sheriff parece ser él, y los malhechores aquellos que los persiguen. El año es 1906 (se trata entonces de un western tardío), pero en ese lugar perdido de Oklahoma las bondades tecnológicas del siglo XX aún no han tocado el timbre de casa. De más está decir que la pandilla salvaje de tres, que pronto serán varios más, dirigida con mano firme por Ketchum (Stephen Dorff), no tarda en hallar el escondite del fugitivo Curry (Scott Haze): la hasta ese momento apacible granja del viejo Henry.

Usualmente destacable por sus papeles secundarios (puede vérselo en La balada de Buster Scruggs, de los hermanos Coen, entre otras varias docenas de títulos), La leyenda regresa está diseñada para el lucimiento de Tim Blake Nelson, que se apropia del personaje, de la historia y de la pantalla sin esfuerzo evidente. De a poco, va quedando claro que el campesino inofensivo guarda varios secretos detrás de un armario, y una vida previa, durante la juventud, que poco y nada tiene que ver con los arados, los caballos y las gallinas. El título en español señala en esa dirección, pero no vale la pena detallar aquí los pormenores de ese pasado. Baste decir que cuando a Henry no le queda otra salida, es capaz de tomar las armas y defender lo que es suyo y a los suyos sin remordimientos.

Potsy Ponciroli construye un relato tenso, elegante y siempre efectivo, utilizando la pantalla ancha en todo su esplendor, ya sea en los planos que se abren al horizonte de las planicies y campos labrados o dentro de los apretados confines de la construcción de madera donde habitan los personajes. Con algún guiño a Los imperdonables y otros cuentos de hombres buenos que alguna vez no lo fueron, La leyenda regresa se impone con fuerza por su violencia seca y por la impactante presencia de Blake Nelson, en el que probablemente sea uno de los grandes papeles de su carrera.