Dirigentes de distintas centrales sindicales, de gremios del sector privado, estatales y municipales salieron a criticar duramente a las entidades empresarias, gobiernos provinciales y comunas que se niegan a pagar el bono de 60 mil pesos en dos cuotas que anunció el ministro de Economía, Sergio Massa, para los trabajadores registrados de menores ingresos. "Nadie va a quebrar de estos grandes empresarios que se enriquecieron aumentando los precios por otorgar un bono de 30 mil pesos", expresó el el titular de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky. En tanto, el secretario general de la Federación Gráfica Bonaerense, Héctor "Gringo" Amicheti, calificó como "una postura política de extorsión" la actitud de un sector importante del empresariado para con el Gobierno. En cambio, el líder de la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerense, Rubén “Cholo” García, advirtió que podría haber “enfrentamientos” en aquellas comunas que no paguen el bono, al tiempo que arremetió contra los intendentes de Juntos por el Cambio que tienen a sus empleados como “esclavos”, mientras “muchos tienen miles de millones de pesos en plazos fijos, como Lanús o Tres de Febrero".
"Oponerse a estas medidas es pretender que siempre las crisis las paguemos los sectores populares", afirmó Yasky en respuesta a principales entidades empresarias que se oponen al bono y, por el contrario, celebró que “haya entidades de empresas pymes que fueron las primeras en salir a respaldar las medidas y su cumplimiento”.
El secretario general de la CTA-T, citó un informe del Centro CIFRA-CTA que muestra que “los grupos económicos que tienen capacidad de fijar los precios, fundamentalmente alimenticias, son quienes más ganaron en rentabilidad con la inflación y es ahí dónde hay que buscar los recursos para que no sufran las consecuencias los sectores populares” y señaló: "Hay que poner un caso testigo entre los grandes formadores de precios con un castigo ejemplar ante los abusos para que la sociedad vea que el gobierno transpira la camiseta para defender la mesa de los argentinos".
Con respecto a los gobiernos provinciales y municipales, Yasky opinó que “quienes están en proceso de discusión paritaria pueden incorporar allí estos bonos, pero aquellos que ya cerraron las negociaciones antes de la devaluación dederán pagar estas sumas para compensar lo perdido”.
Amichetti, en tanto, criticó la "política de extorsión" de empresarios por su rechazo al pago del bono. El dirigente gráfico cuestionó que ese posicionamiento no es expresado "a nivel empresa" sino que "lo están planteando cámaras empresariales, con lo cual desnuda una posición política".
"Son medidas absolutamente necesarias por el grado de deterioro económico que se sufre en general producto de esta crisis", evaluó Amichetti por AM 530 al referirse a los anuncios del ministro de Economía. Al tiempo que evaluó que las medidas "de alguna manera van a acompañar, si había uno de los sectores patronales reacios a abrir las paritarias, esto empuja".
El líder de los municipales bonaerenses (que agrupa a 135 municipios), arremetió contra los intendentes de JxC que se niegan a pagar y el bono y advirtió que podría haber "enfrentamientos" en los distritos que no se cumpla.
“Nosotros venimos peleando con los intendente de JpC donde existen los peores sueldos de la provincia. Tenemos bien claro que no es un ilícito tener plazo fijos en el banco debido a la inflación porque tienen que cuidar la plata del erario municipal, pero no es ético pagarles 60, 70 mil pesos de básico de un sueldo conformado que no llega a 140 mil pesos, con una canasta básica de 250 mil, cuando tienen plazos fijos y pretenden que el gobernador los ayude”, dijo “Cholo” García a PáginaI12.
“Debe haber excepciones –continuó García— pero nos preocupan las comunas poderosas, como Lanús, Tres de Febrero, donde a nosotros nos consta que tienen dos o tres masas salariales a plazo fijo”. “En Pinamar, que gobierna Martín Yeza, nos tuvimos que movilizar varias veces porque paga cuando quiere, no cumple con el convenio colectivo, pagan menos de lo que corresponde, no le dan ropa de trabajo y el intendente te dice ‘no te voy a pagar’”, ejemplificó.
“Los intendentes de JxC tienen un problema ideológico con los trabajadores y pretenden tratarnos como esclavos, donde tienen trabajadores de 20 y 30 años de servicio precarizados a pasar que en la provincia tenemos un convenio que después de un año de servicio tienen que pasar a planta permanente que no cumplen”, sentenció.
“Somos una federación muy movilizadora y de debate. No tengo ninguna duda que aquel intendente que no quiera o se niegue a pagar nosotros vamos a ir a instalar el debate en el distrito, con sus trabajadores y con la sociedad. Para sacar la basura debajo de la alfombra y mostrar que le niegan 30 mil pesos a los municipales que somos los perores pagos del espectro laboral argentino y tienen tres, cuatro masa salariales juntando interés”, dijo García a este diario con respecto a que el gremio no se quedará de brazos ante los incumplimientos.
El actual secretario adjunto de ATE y electo para dirigir el gremio estatal a partir de diciembre, Rodolfo Aguiar, evaluó que "la situación de los asalariados es grave", y dijo que aun siendo "un monto escaso la suma debe implementarse en todas las provincias y municipios para que funcione como un momentáneo alivio". Aguiar, que también es titular de la CTA Autónoma (CTA-A) de Río Negro, sostuvo que esa suma "no repara lo perdido por la inflación y, además, es por única vez, se abonará en cuotas y excluye a un importante universo de trabajadores, lo que es un condicionamiento para las negociaciones salariales". Además de reclamar la apertura de las partidarias para los estatales, a las que el gobierno convocó ayer.
Una postura que también adoptó la CGT. La central sindical que conducen Héctor Daer, Carlos Acuña y Pablo Moyano respaldó la decisión de Massa y afirmó a través de un comunicado que "este importante esfuerzo del Gobierno Nacional es una muestra del compromiso con los distintos sectores de nuestro país, cuyo aporte es fundamental para construir la Argentina que queremos".
Sin embargo, el esfuerzo de la mayoría de los gremios cegetistas, en especial los más poderosos, tienen puestos sus esfuerzos y la reapertura y la negociación paritaria mas allá del bono que reciban los sindicatos con salario mas rezagados.