Quiénes fueron Ana Carmen Macri, Delia Degliuomini de Parodi y Susana Correché de Novick, por qué se las encarceló en 1955, cuáles fueron los cargos. Si bien forma parte de nuestra historia reciente, el caso de las legisladoras peronistas detenidas en 1955 es casi desconocido. Por eso, el Museo Penitenciario Argentino Antonio Ballvé (Humberto Primo 378), dirigido por Oscar González, decidió montar la muestra "Del Congreso a la cárcel" que puede verse los domingos de 11 a 15 y que cuenta la historia de estas valientes.

“La muestra es el relato del interrumpido comienzo de las mujeres en el ejercicio de sus derechos políticos. Cuando a sólo a cuatro años de la primera elección, en 1951, donde votaron y fueron electas ciudadanas, el golpe de 1955 vino a cortar violentamente aquel proceso de ampliación de derechos, llevando a prisión a la primera camada de mujeres legisladoras de la historia argentina. Episodio interesadamente ocultado que desde el Museo rescatamos para que no haya olvido”, dice Oscar González.

Luego del Golpe de Estado del 16 de septiembre de 1955, 32 legisladoras pertenecientes al Partido Peronista Femenino (PPF) fueron encarceladas en lo que hoy es el museo, en la causa 4.198, denominada Perón, Juan Domingo y otros, por “traición a la Patria y Asociación Ilícita”. Según pudieron investigar las curadoras de la muestra, Graciela Fusco y Vivian Elem, gracias a los registros encontrados el plazo de detención de cada una de las legisladoras osciló entre un mes y casi tres años: las últimas siete recluidas en el Asilo recuperaron la libertad por el decreto 15.401 del 22 de noviembre de 1957 que proponía una amnistía a todos los encarcelados políticos.

Lo interesante de la muestra, además de conocer esta historia poco difundida, es que el edificio donde se emplaza, es también parte imprescindible de nuestro patrimonio, entrar en él es como ingresar en un túnel del tiempo: pueden verse boticarios de fin del siglo XIX, máquinas de coser antiguas, vestimentas de la época mientras se recorren las galerías de fines del XVIII. En 1890 se entregó la Residencia, actual sede de este Museo, a la Congregación de Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor, una orden religiosa de origen francés con trayectoria en administrar institutos de detención para mujeres en diferentes países de América latina –Uruguay, Chile, Paraguay, Colombia–, Europa y Estados Unidos. Por ese entonces, la Orden quedó a cargo de la Cárcel de Mujeres que –durante casi 100 años–, mantuvo la administración del penal bajo un régimen disciplinario que “abogó por la regeneración espiritual y moral a través de prácticas del oficio piadoso”.

En palabras de Graciela Fusco: “Las legisladoras peronistas, injustamente detenidas, representaron la legitimidad democrática y la lucha por los derechos de las mujeres. Por eso quisimos homenajearlas con esta muestra temporal: para que esa parte nefasta de la historia política de nuestro país, ignorada por la mayoría, pueda salir a la luz”.