Tras meses de tironeos y sesiones caídas, la Cámara de Diputados de la Nación le otorgó la media sanción a los proyectos que proponen crear cinco Universidades Nacionales, tres de ellas en la provincia de Buenos Aires. Pilar, Ezeiza, y la del Delta, que tendrá su sede principal en Tigre. Finalmente, la aprobación fue posible gracias a la fractura de Juntos por el Cambio y un sector del radicalismo que garantizó el quorum de la sesión. Un cortocircuito dentro de la coalición macrista que, asegura el Jefe de Asesores de la Gobernación, Carlos Bianco, también se visualiza en territorio bonaerense.

“Estamos abriendo centros universitarios en toda la provincia de Buenos Aires, ¡para vos Grindetti que querías cerrar las universidades!”. Con esa expresión, un encendido Axel Kicillof salió al cruce del candidato a la gobernación de Patricia Bullrich quien días atrás cuestionó el financiamiento de la Jefatura de Asesores comandada por Bianco cuyo presupuesto, se encargó de informar el propio Bianco, “se utilizó básicamente en el Programa Puentes”. Así, la conclusión en el gobierno provincial fue clara: Grindetti quiere cerrar universidades. “Andá a preguntarles a los radicales, a los del PRO, y a los pueblos de la provincia de Buenos Aires si quieren más o menos universidades”, le propuso el gobernador.

La vinculación del radicalismo con la educación universitaria, más allá del amplio rechazo de diputados nacionales de la UCR durante la última sesión, también la percibe Bianco en la provincia. “Cuando lanzamos el programa Puentes estaba a disposición de todos los que no tenían carreras, y los gobiernos radicales y peronistas se pusieron en contacto, pero del PRO ninguno”, se encarga de remarcar.

En diálogo con BuenosAires/12, Bianco celebra la votación dio media sanción en el Congreso de la Nación a los proyectos que crean la Universidad Nacional de Pilar, la Universidad Nacional del Delta, y la Universidad Nacional de Ezeiza. “Lamentamos que no se trataron las otras dos que están previstas en Cañuelas y Saladillo”, repara el impulsor del Programa Puentes. Con esta iniciativa como eje de trabajo, destaca que las nuevas casas de estudio van en el mismo sentido que la labor de Puentes, que acerca la oferta universitaria a distintos puntos del interior de la provincia donde el acceso a la educación superior es muy difícil.

Las últimas expresiones de Néstor Grindetti, íntimo amigo de Mauricio Macri, o de la ex gobernadora María Eugenia Vidal y su mítico “los pobres no llegan a la universidad” para criticar la “superpoblación” de universidades, ponen en aprietos a muchos intendentes radicales que sí optan por el arribo de instituciones educativas a sus distritos. Incluso, hoy las palabras del macrismo están más en sintonía con las de la legisladora y candidata a vicepresidenta de Javier Milei, Victoria Villarruel, que se refirió a las universidades públicas como “cajas”.

Al respecto, Bianco sostiene que es un “error” esa calificación, ya que las universidades son autárquicas, con su propio manejo financiero, y cogobernadas. “Es una expresión de campaña, de la misma forma que tratan de ñoquis a los trabajadores estatales, hablando de caja a todo lo que se asigna presupuesto, como hizo Grindetti con el Programa Puentes”, subraya.

Kicillof, Bianco y Magario en una de las inauguraciones del Programa Puentes, en Colón. 


Una contradicción radical

“No sabes la contradicción del intendente de Saladillo”, lanza Bianco durante la conversación. Se refiere a José Luis Salomón, jefe comunal proveniente de la Unión Cívica Radical que gobierna la localidad de la séptima sección que espera por el arribo de su propia Universidad. Este jueves, Bianco estará en Saladillo inaugurando un nuevo Centro universitario del Programa Puentes. “Llevamos 20 construidos y hay 21 en construcción”, señala el Jefe de Asesores. “El intendente está de acuerdo con que llevemos las carreras desde la Provincia, está a favor de contar con su universidad, pero sus correligionarios no se dignaban a tratar el proyecto”, asegura antes de sintetizar su postura: “Sucede que se llenan la boca de que les interesa la educación pública pero después con los votos no acompañan la construcción de universidades”.

La salida a un laberinto que llevó a dos sesiones caídas a fines del 2022 y una paralización del Congreso Nacional producto de que JxC tomó la postura de no brindar quórum para sesionar hasta que el oficialismo no termine con el juicio político a la Corte Suprema, apareció cuando un grupo de legisladores que responden al diputado Emiliano Yacobitti, tomaron asiento en el recinto. Los integrantes Evolución accedieron a discutir los proyectos ya que uno pertenecía al sector de Yacobitti: la creación de la Universidad de Río Cuarto, aprobada también en la sesión. Sólo votaron a favor de esa. 

A futuro, queda otro elemento de negociación para el peronismo con el mismo bloque radical: Yacobitti también es el impulsor de la Universidad Nacional de Saladillo.

Un testigo de la jornada y vicepresidente segundo de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados de la Nación es Daniel Arroyo. En conversación con este medio, explica que tres variables posibilitaron el quórum para el tratamiento de las nuevas universidades. En primer lugar, el abandono de JxC de su postura acerca de inmovilizar el Congreso. “Hay disidencias en Juntos por el Cambio”, asegura el bonaerense. El quiebre de la coalición macrista estuvo acompañado por el apoyo de fuerzas políticas del bloque Peronismo Federal referenciadas con Juan Schiaretti, tercer punto que posibilitó el quórum. Ante las posturas que advierten que “sobran” universidades, el ex ministro de Desarrollo Social desafía esa aseveración al asegurar que en países como Colombia, Brasil o México el promedio de universidades es de una cada 150 mil habitantes, cuando en Argentina es de una cada 300 mil.

Para el legislador bonaerense, la creación de universidades es “clave” porque genera nuevos profesionales y materializa la movilidad ascendente. “El 85 por ciento de los alumnos de estas nuevas universidades son primera generación de alumnos en educación superior”, asegura. Pero, ante todo, remarca un rol estratégico del estudio terciario que es “la investigación y el desarrollo” a partir de nuevas carreras con un fuerte vínculo local, como la industrialización en Pilar, el hábitat costero en el delta, y las condiciones laborales en el sur del conurbano en Ezeiza.

Universidad Nacional de Pilar

En 2020 el intendente de Pilar, Federico Achával, presentó el proyecto de Ley para la creación de la Universidad Nacional de Pilar (UNAP). Fue en compañía del entonces presidente la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa, y el ex ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta. El lugar elegido para su funcionamiento es el Instituto Carlos Pellegrini, un lugar histórico del distrito que debió batallar contra la última gestión del PRO en el municipio, comandada por Nicolás Ducoté, que quiso privatizar su predio.

“Las grandes civilizaciones se construyeron bajo un proceso educativo, que es el más transformador de todos”, afirma Achával a BuenosAires/12. El intendente pilarense hace hincapié en que el proyecto de la UNAP “nace con el corazón de la comunidad”. Cuenta que más de 50 mil firmas que incluían a la Cámara de Comercio local, empresas del parque industrial, sociedades de fomento, jóvenes, fueron presentadas en el Congreso de la Nación porque “todos creían necesario dar este salto de calidad”.

La mirada de la Universidad, explica el mandatario, estará orientada, primordialmente, al polo industrial y logístico que es el Parque Industrial de Pilar, “el más grande del país”. Achával detalla que la UNAP estará compuesta por tres Institutos, uno de Desarrollo Productivo, otro Desarrollo Tecnológico y uno de Desarrollo Humano. “Me tocó conversar varias veces con gerentes de recursos humanos y los propios dueños de las empresas en el Parque y me decían que no contratan muchos trabajadores de Pilar por la falta de formación”, apunta.

En el plano productivo, la Universidad tendrá carreras como Ingeniería industrial, Electromecánica y Tecnicatura en Logística. En lo que respecta a lo tecnológico, la oferta incluye Biotecnología, Robótica e Informática; y desde lo Humano, habrá carreras como Kinesiología, Enfermería, y Nutrición.

De cara al futuro, el intendente sostiene que el peronismo debe construir los consensos necesarios para que no se avance en la destrucción de acuerdos históricos en la sociedad argentina como lo es la educación pública, gratuita y de calidad. “En el fondo, esto tiene que ver con que un pibe de Pilar tarda más de dos horas de ida y dos de vuelta en viajar a estudiar a Capital, lo que imposibilita el derecho porque muchos encima trabajan”, relata, al tiempo que lanza una definición sobre la oposición: “Eso no se ve cuando se analiza el Excel.”

Federico Achával, celebra durante la sesión. 

Universidad Nacional del Delta

“Vamos a construir en Tigre, San Fernando y Escobar un espacio que brinde las herramientas necesarias para que nuestros jóvenes y adultos puedan estudiar y se formen para ser competitivos en el mercado laboral que exigen los tiempos que vivimos”. Estas fueron las palabras elegidas por Malena Galmarini, titular de AySA, dirigente tigrense, y principal impulsora del proyecto.

Con una sede central en la localidad de Pacheco, partido de Tigre, y en tierras que cede Radio Nacional, la UNDelta apuesta, según explica Galmarini, a construir tanto en Tigre, como en San Fernando y Escobar, “un espacio que brinde las herramientas necesarias para que nuestros jóvenes y adultos puedan estudiar y se formen para ser competitivos en el mercado laboral que exigen los tiempos que vivimos”.

Esa competitividad se traducirá en carreras distribuidas en cinco Institutos: de Tecnología y Producción, de Gobernanza y Asuntos Globales, de Salud y Bienestar, de Innovación y Educación, de Desarrollo Sostenible y Turismo. Durante el primer año se espera comenzar con la cursada de carreras como: Licenciatura en Turismo; Licenciatura en Política Local y Gestión Pública; Licenciatura en Enfermería; Licenciatura en Gestión de Instituciones Educativas; Ingeniería Naval; Licenciatura en Ciencia de Datos; Derecho y Licenciatura en Relaciones Internacionales y Gobernanza Global.

Dentro de las expectativas, por ejemplo, se analiza firmar convenios con astilleros para, a través de sus propios talleres, los alumnos de UNDelta tengan la posibilidad de reparar y también construir, “con planes y subsidios de la Nación”, embarcaciones para el transporte fluvial público de pasajeros.

Malena Galmarini, durante la sesión del martes por la noche. 

Universidad Nacional de Ezeiza

En la localidad aeroportuaria por excelencia, se ubica la, hasta ahora, Universidad Provincial de Ezeiza (UPE). Dulce Granados, hoy al frente del Concejo Deliberante del distrito, fue diputada nacional y presentó la iniciativa durante sus años en la Cámara de Diputados de la Nación. "Este proyecto es el producto de un trabajo colectivo, que inicié hace más de una década en el mismo parlamento que hoy tiene en sus manos la posibilidad de hacerlo crecer”, expresó en una carta a vecinos y vecinas de su partido.

La ex legisladora es la principal impulsora de la nacionalización, pero el proyecto transitó un largo camino hasta la media sanción. Presentado inicialmente por Granados, el proyecto perdió estado parlamentario dos veces. A la primera, quien recogió la propuesta fue Cristina Álvarez Rodríguez, pero corrió la misma suerte que Granados y el proyecto nunca llegó al recinto. Distinto fue el destino para Victoria Tolosa Paz, quien tomó la iniciativa que hoy alcanzó el primer paso de cara a la sanción de la Ley.

En la UPE hoy se dictan siete carreras, entre las que se destaca la Licenciatura en Gestión Aeroportuaria, de claro vínculo con la actividad laboral de la región a raíz de la ubicación del Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini en Ezeiza. También se dictan, entre otras, Licenciatura en Comercio Internacional, en Higiene y Seguridad, y al Tecnicatura en Logística.