Seguirá preso un policía de Seguridad Vial acusado como autor del femicidio de Claudia Lorena González, de 28 años, cometido en la ruta 90, hace dos años. Se trata de una resolución judicial en base al pedido del fiscal Julián Cochero durante una audiencia en los tribunales de Melincué. El imputado tiene 30 años y era expareja de la víctima. El día del hecho, cometido en jurisdicción de la localidad de Elortondo, usó su arma reglamentaria y también intentó quitarle la vida a otro hombre que estaba con Claudia en ese momento. "Se bajó del móvil, se acercó a la ventanilla del otro auto, le pidió al conductor que descienda y luego le disparó con el arma reglamentaria en la cabeza a su expareja”, describe la acusación fiscal. Hay otros dos agentes acusados por incumplimiento de deberes.

La resolución de la jueza Silvina Marinucci se conoció como resultado de la audiencia solicitada por el fiscal a cargo de la investigación para que se prorrogue la privación de la libertad por un año más. Es que la causa ya está en la etapa final hacia el juicio oral y público en el que se pedirá la pena de prisión perpetua para el uniformado, identificado como I. J. L.  “Próximamente se llevará adelante la audiencia preliminar", dijo el fiscal sobre el último paso antes del debate en el que se expondrá la prueba reunida.

El femicidio de González fue cometido minutos antes del mediodía del sábado 18 de septiembre de 2021. “El acusado y otros dos policías circulaban por la ruta provincial número 90 desde Elortondo a Chapuy en un patrullero de la Policía de Seguridad Vial de la provincia, cuando vieron que en sentido contrario se trasladaba un automóvil en el que iba su expareja y un hombre”, indica la acusación.

Cochero precisó que “al advertir quiénes iban en el vehículo, los policías cambiaron el sentido de circulación y comenzaron una persecución –con señas de luces, baliza y sirena encendidas–, hasta que a unos tres kilómetros de Elortondo, los policías cruzaron el patrullero, y el automóvil tuvo que detenerse en la banquina”.

En ese momento, “I. J. L. se bajó del móvil oficial, se acercó a la ventanilla del otro auto, le pidió al conductor que descienda y luego le disparó con el arma reglamentaria en la cabeza a su expareja, ataque que le produjo la muerte de forma inmediata”, narró el fiscal. E indicó que, “inmediatamente después de matar a la mujer, el policía acusado quiso dispararle con el arma reglamentaria al hombre que estaba con ella. No consiguió su objetivo porque el arma se encasquilló, razón por la cual comenzaron a pelear y el hombre logró sacarle el arma al acusado, quien luego intentó quitarle la vida ahorcándolo ante la inacción de los otros dos policías”.

En relación a la muerte de González, el fiscal Cochero le atribuyó al policía la autoría del delito de homicidio doloso calificado por ser cometido contra una mujer, perpetrado por un hombre y mediante violencia de género (femicidio); por la relación de pareja y por abuso de la función de fuerzas de seguridad.

Además, por el ataque al hombre que estaba con la mujer, le endilgó la autoría de tentativa de homicidio agravado por abuso de la función de las fuerzas de seguridad.

En relación a los otros dos policías que iban en el auto, que tienen 29 y 26 años, Cochero les atribuyó no haber actuado ante los ataques que cometió su compañero y les atribuyó la autoría del delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público, y solicitó –para cada uno– la pena de dos años de prisión de cumplimiento condicional, más una inhabilitación especial para ejercer cargos públicos por cuatro años.