La Federación Sindical del Petróleo, Gas y Biocombustibles declaró el estado de alerta en todas las refinerías del país, en defensa de los trabajadores del Sindicato del Petróleo y Gas de Salta y Jujuy, por la crítica situación que atraviesa hoy la refinería de Campo Durán (ubicada en el departamento San Martín), que frenó sus actividades por 45 días por faltante de materia prima.
La situación generó aún mayor preocupación cuando llegó a manos de los trabajadores la comunicación oficial de la empresa Refinor, que decidió licenciarlos hasta que agoten sus días de vacaciones. En tanto que la falta de materia prima en la refinería tiene que ver, según el comunicado de la Federación, con la falta de pago a los proveedores de gas y crudo.
Siete empresa son proveedoras de crudo: cinco están radicadas en Salta, una en Jujuy y otra, en Formosa. Mientras que el gas para el gas licuado de petróleo (GLP) proviene de Yacimientos Fiscales Petrolíferos Bolivianos (YPFB).
En la refinería de Campo Durán se cuentan más de 500 puestos de trabajo, pero hay otros 100 en “pequeños regimientos” de trabajadores que entregan su producción a la empresa. Por lo cual se estima que están en riesgo 600 puestos de trabajo.
“No hay garantía de entrega de materia prima después del 16 de noviembre”, dijo en declaraciones a Radio Nacional el secretario general del Sindicato de Gas y Petróleo de Salta y Jujuy, Sebastián Barrios. Añadió que entre las causas de la falta de pago a los proveedores se encontraría una interna en el directorio que conforma YPF con el grupo Vila Manzano.
Al ser consultado sobre la alternativa que genera la extensión y puesta en funcionamiento del gasoducto Néstor Kirchner, inyectando gas desde Vaca Muerta, el sindicalista afirmó que esta posibilidad les "deja en una situación más vulnerable porque vendría con gas pobre y no tendríamos posibilidad de procesar”. De todas maneras, indicó que están haciendo gestiones para “que el gas venga más enriquecido para procesarlo”, y que este gas enriquecido quede solamente en el centro del país.
Intervención provincial y nacional
En la carta firmada por la Federación y el Sindicato, se solicitó de manera urgente la intervención del gobierno nacional, la Secretaría de Energía y la administración provincial a los fines de garantizar la fuente laboral. Ayer desde la provincia se indicó solamente que están realizando gestiones. Para el lunes está prevista una audiencia de conciliación simple en el Ministerio de Trabajo de la Nación, en Buenos Aires.
"La situación de la refinería es de extrema complejidad. Los trabajadores hemos realizado esfuerzos firmando un acuerdo de diferimiento en el pago de aportes y contribuciones, pero la contraparte -está a la vista- no ha estado a la altura", explicaron los gremialistas en un comunicado. "Necesitamos el compromiso de las autoridades de Refinor para poner en valor la refinería, que tiene un valor estratégico para el desarrollo hidrocarburífero de Salta y la región. Los trabajadores tuvimos y tendremos siempre voluntad de diálogo y entendimiento, pero el límite es el trabajador", destacaron.
Los referentes sindicales alertaron que la destilería tiene una capacidad de procesamiento de 20,3 millones de metros cúbicos/día de gas para obtener los subproductos propano, butano y GLP; pero al faltar materia prima que justifique la estructura, el futuro de su funcionamiento es incierto.
Detallaron que el lunes último Refinor paró las plantas de destilación atmosférica (Topping), de reformado catalítico de naftas (Reforming) y el único sistema de turboexpansión de gas (Turbex 2) que se mantenía en funcionamiento en el complejo del norte salteño, luego de que “las operadoras de los yacimientos de la Cuenca del NOA le cortaran las entregas por incumplimientos de los plazos de pago”.
Dólar petróleo
Por otro lado, la secretaria de Energía de la Nación, Flavia Royón, consideró que con la vigencia desde el lunes y hasta el 20 de octubre de un tipo de cambio diferencial para todas las cuencas y productos del sector hidrocarburífero se estimulará la inversión y se garantiza la estabilidad macroeconómica.
La funcionaria afirmó que la medida se inscribió dentro de las políticas que la cartera del ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, lleva adelante para contribuir a la solidez macroeconómica del país. “Se trata del mismo esquema que se aplicó al dólar soja, pero para el sector petrolero y con alcance para todas las cuencas del país”, definió Royón.
Massa había anticipado que el objetivo de la mejora en el tipo de cambio iba a permitir estimular más inversiones en la producción y, además, garantizar estabilidad financiera. En este mismo sentido, Royón dijo que tomaron "la medida considerando que hoy el sector de los hidrocarburos tiene un precio para el mercado interno muy por debajo de los precios internacionales, que han tenido una fuerte suba. Por eso buscamos preservar las inversiones y el desarrollo que venimos teniendo en el gas y el petróleo nacionales”.
Sobre la captación de nuevas divisas que propicia la medida consideró: “Esperamos un ingreso de divisas del orden de los 1.200 millones de dólares por parte del sector energético. Tienen que liquidarse en el sistema antes del 20 de octubre”.
Explicó, además, que este beneficio tiene como complemento la virtud de “permitir robustecer las reservas del Banco Central en el contexto de un panorama electoral donde suelen aparecer ciertos sectores que quieren especular con movimientos financieros”.
A través de la resolución 808/23 se habilitó la incorporación de todas las cuencas y productos exportables del sector de los hidrocarburos al esquema cambiario ya utilizado para la liquidación de la soja (decreto 576/2022).
De esta forma, para el plazo que corre entre el 2 y el 20 de octubre, las compañías operantes estarán en condiciones de liquidar el 25 por ciento de sus exportaciones al valor del tipo de cambio denominado Contado con liquidación (CCL). A su vez, las empresas conservan el acceso al mercado oficial (Mercado Único y Libre de Cambios, MULC) para el 75 por ciento restante de su producción exportable.
En cuanto a la recepción del incentivo por parte de la industria, la secretaria de Energía afirmó: “El sector lo ha recibido muy bien, porque es un nuevo aliciente a la producción. Ya estamos trabajando con las empresas para que puedan adelantar exportaciones antes del plazo límite”.