Desde Santa Fe

El Tribunal Oral de Santa Fe escuchó ayer los alegatos de la acusación en el juicio a dos policías que operaban en la patota del norte santafesino y zafaron del primer proceso en 2013 porque estaban prófugos. El fiscal Martín Suárez Faisal pidió que los condenen a los dos por secuestros y torturas: a 9 años de prisión al ex oficial de Inteligencia Juan Antonio Mulasano, quien en el debate llamó "enemigos subversivos" a sus víctimas y hasta le dijo al juez federal de Reconquista que lo investigaba: "Yo sé quién es usted". Y a 10 años de cárcel a su colega de banquillo, Omar Noce, un ex oficial de la Guardia Rural Los Pumas y ayudante del jefe del centro clandestino (una especie de secretario y guardaespaldas, según los testigos), que hasta operó en Villa Constitución, en 1974. Mientras que el abogado querellante Iván Bordón solicitó 15 años de prisión para ambos represores, el máximo de la escala. Hoy seguirán los alegatos de las defensas y el viernes, se conocerá el veredicto.

Mulasano y Noce son juzgados por la persecución a 16 activistas gremiales y políticos del peronismo y la izquierda en el circuito represivo que integraban la III Brigada Aérea, la Jefatura de Policía de Reconquista y la Guardia Rural Los Pumas en Santa Felicia, cerca de Vera. En agosto de 2013, el Tribunal condenó a los jefes del grupo de tarea: los ex oficiales de la Fuerza Aérea, Danilo Sambuelli (a 21 años de prisión) y Jorge Alberto Benítez (17 años de prisión) y a otros cinco policías de la provincia. Mulasano y Noce esquivaron ese juicio porque se fugaron por más de un año.

El fiscal imputó a Mulasano la "privación ilegal de la libertad" y "tormentos agravados" a nueve activistas gremiales y políticos, entre ellos el ex secretario adjunto de la Uocra de Reconquista Lorenzo Aguirre y Eduardo Sartor, de las Ligas Agrarias. Y a Noce los mismos cargos por los secuestros y torturas de siete militantes de la JP y la izquierda, entre ellos el ex intendente de Vera, Juan Antonio Giordano.

Suárez Faisal describió el circuito del terrorismo de estado en el norte de la provincia : Sambuelli era el jefe de Inteligencia de la III Brigada Aérea, fue interventor de la Municipalidad de Reconquista y de la Uocra. Mientras que Benítez se desempeñó como interventor de la Jefatura de Policía de Reconquista.   

Mulasano era operativo, con fuerte compromiso ideológico con la dictadura en la persecución de militantes políticos y sindicales. Uno de los testigos dijo que él era el que los "fichaba porque participábamos en política". Y después, el propio imputado calificó a sus denunciantes como "enemigos subversivos".

En el juicio -siguió el fiscal‑ se pudo probar que Mulasano participó en privaciones ilegítimas de la libertad, allanamientos ilegales y secuestros. "Intervenía en el primer eslabón del engranaje criminal, que luego continuaba con interrogatorios bajo tortura". Una tarea que compartía con agentes de otras fuerzas y del Ejército y sus víctimas eran los "fichados" por su militancia política o sindical. 

Ese "rasgo" de Mulasano, su "actitud amenazante" que relataron sus víctimas, el fiscal lo subrayó en otro hecho: cuando lo capturaron y quedó frente al juez Alurralde, a quien le dijo: "Usted no sabe quién soy yo, pero yo sí se quién es usted".

El otro represor, Omar Noce fue "ayudante" del jefe de Los Pumas desde 1975 hasta 1979. "Era la mano derecha del mandamás del centro clandestino de detención". Uno de los imputados en la causa ya fallecido lo describió como "guardaespaldas" del jefe.

El cuartel de Los Pumas en Santa Felicia sirvió para "el cautiverio ilegal de personas, torturas, interrogatorios, intentos de violación, simulacros de fusilamiento, abusos de todo tipo y otras crueldades", según quedó acreditado por diversos testimonios tanto en el juicio anterior como en este. Y "el lugar de los interrogatorios" identificado por testigos y víctimas era la "zona de la Jefatura" y "la oficina del jefe" de la Guardia, donde operaba Noce.

Según el fiscal, la "comunión ideológica" de Noce con la dictadura se refleja en su legajo, donde consta que lo felicitaron por varias operaciones, entre ellas en Villa Constitución, en 1974. Y recordó el copamiento de esa ciudad en marzo de 1975 con represores de la Policía Federal, la Policía de Santa Fe, la Prefectura, un grupo paramilitar formado por integrantes de Los Pumas, matones de la UOM y pistoleros a sueldo del Ministerio de Bienestar Social y la Triple A, en lo que se conoce como el operativo Serpiente Roja del Paraná.