El juez laboral Marcelo Gallucci determinó que un médico tiene derecho a una serie de indemnizaciones y compensaciones por haber trabajado sin estar regularidado durante 30 años en el Sanatorio de la Mujer. El profesional ingresó en marzo de 1991 y se desempeñó como jefe del servicio de pediatría, pero siempre fue obligado a facturar como monotributista. El juez destacó que desde el inicio de la relación y hasta el momento de la desvinculación, la demandada la encubrió bajo la apariencia de un contrato de locación de servicios. A principios de septiembre de 2018, el sanatorio comenzó a negarse a otorgarle tareas, por lo cual el médico se vio obligado a formalizar los reclamos que venía realizando verbalmente mediante telegrama laboral.
LABORAL
Monotributo médico
