El Senado de la provincia de Buenos Aires tuvo su sesión preparatoria y replicó lo ocurrido en Diputados: un peronismo unido y una oposición que estalló en pedazos. Axel Kicillof contará con un bloque de 21 legisladores, a tres de tener el quórum propio. Por el lado de Juntos, habrá dos bloques que funcionarán como un interbloque. La Libertad Avanza (LLA), en medio de agresiones entre sus partes por las fracturas en la Cámara baja, tendrá cinco senadores repartidos en tres bloques.

A diferencia de lo que sucede en Diputados, la presidencia de la Cámara de Senadores la elige la ciudadanía y no el cuerpo legislativo. El sillón principal del recinto está en manos de la vicegobernadora, Verónica Magario, reelecta junto a Kicillof con el 45 por ciento de los votos. Durante los últimos dos años, el Senado tuvo una estricta paridad de 23 legisladores por bando, algo que se rompió luego de los últimos comicios, donde el oficialismo consolidó una mayoría compacta.

El abroquelamiento del oficialismo se contrapuso al múltiple fraccionamiento de la oposición. El bloque de Juntos, nombre con el que se denomina Juntos por el Cambio en el ámbito legislativo provincial, no mantuvo sus 20 soldados en fila: se dividió en dos bloques que funcionarán como un interbloque, una figura que no existe en la Legislatura.

El quiebre es similar al de Diputados, donde el PRO tiene once bancas por un lado y la UCR por otro con seis senadores propios y dos incorporaciones. Al igual que en la Cámara baja, los radicales se hicieron con un representante del GEN, en este caso la senadora Lorena Mondagarán. Pero a su vez, lograron atraer al representante de Emilio Monzó en el recinto, el senador por la cuarta sección Marcelo Daletto. De esta forma, la denominación del bloque será UCR + Cambio Federal, emulando la marca utilizada por el bloque de Monzó en manos de Miguel Ángel Pichetto en la Cámara de Diputados de la Nación.

La definición que queda pendiente es la del senador y ex intendente de San Miguel, Joaquín De la Torre, quien, por lo pronto no integrará ninguno de los espacios del ex Juntos. La decisión no sorprendió ya que el miércoles, el diputado Juan José Esper, alfil de De la Torre, tuvo esta postura.

Mientras tanto, los libertarios continuaron su atomización y las cinco bancas de la Cámara Alta quedaron divididas en dos monobloques y un espacio de tres senadores. La múltiple fractura tiene su origen en las discrepancias con el pacto de Acassuso acordado por Mauricio Macri y Javier Mieli.

Unidos contra separados

Si bien falta la confirmación formal, todo indica que la senadora oriunda de San Isidro, Teresa García, continuará al frente del bloque de Unión por la Patria. El espacio que será liderado por García tiene a toda la tropa ordenada, misma situación que se da en la Cámara baja. Solo resta saber quién reemplazará al senador de Bolívar, Eduardo “Bali” Bucca, quien decidió tomarse licencia y ocupar su banca como concejal electo en su distrito.

Un senador que juró aunque aún hay incertidumbre sobre su destino es Sergio Berni. Accedió a su banca desde la segunda sección, pero todavía es el Ministro de Seguridad bonaerense. “Lo decidirá el gobernador”, fue su respuesta ante los medios sobre su posible continuidad al frente de la cartera provincial.

El oficialismo también se hizo con la única vicepresidencia que fue votada en la jornada del jueves. De esta manera, Luis Vivona permanecerá en la vicepresidencia primera por los siguientes dos períodos legislativos. Las restantes cinco quedarán vacantes, según aseguraron un par de senadores a este medio, hasta la semana próxima.

Desde el espacio de Juntos, las divisiones que ya se observaban tras el cierre de listas y, más aún, después de las elecciones de octubre, terminaron por concretarse. Cabe recordar que hace una semana el gobernador Kicillof mandó a la Legislatura un proyecto de endeudamiento que contaba con los avales del radicalismo y parte del PRO, pero que, por las diferencias internas del partido amarillo, ni siquiera pudo reunirse la cantidad necesaria de senadores para votarlo.

En Diputados, como hay presencia de la Coalición Cívica, el bloque de Juntos se dividió en tres. En la Cámara alta trabajarán en dos bloques. El PRO constituyó un espacio propio de once legisladores con Alejandro Rabinovich, hombre del intendente marplatense Guillermo Montenegro, como presidente. Continuará en su cargo a lo largo de 2024 y en 2025 le cederá el lugar al alfil de Daniel Angelici y ex candidato a presidente de Boca Juniors, Christian Gribaudo.

Entre los legisladores que permanecerán bajo la denominación del partido que llevó a Macri a la presidencia está la titular del PRO bonaerense, Daniela Reich, quien también pica en punta para ocupar una de las vicepresidencias que siguen continúan en negociaciones.

El resto de las bancas amarillas estarán cubiertas por Aldana Ahumada, María Emilia Subiza, que responde al clan Passaglia, y Juan Manuel Rico Zini de Pergamino. También estará Jorge Schiavone, fiel ladero de Néstor Grindetti, la multifacética Florencia Arietto, Yamila Alonso de Junín, quien supo ser uno de los armadores de María Eugenia Vidal en la provincia, Alexander Campbell, y Marcelo Leguizamón que responde al ex intendente de La Plata, Julio Garro.

Tras ocho años de convivencia, la UCR finalmente tuvo su emancipación del PRO. Por medio de Agustín Máspoli en la presidencia y Ariel Bordaisco en la vice, comandará un bloque de ocho legisladores. Seis serán radicales, ya que a Máspoli y Bordaisco se le suman Alejandro Cellillo, Nerina Neumann, Flavia Delmonte y María Eugenia Gil, quien reemplazará a la intendenta electa de General Arenales, Erica Revilla.

Además del sexteto radical, formarán parte Mondarán del GEN, partido comandado por Margarita Stolbizer, y Daletto del monzoísmo.

La libertad de agredir

En medio de fuertes cruces, acusaciones de traición e insultos entre libertarios, los senadores de LLA conformaron tres bloques. El monobloque que se autodenomina como el oficial estará integrado por Sebastián Pareja. Otro monobloque estará en manos de Betina Rivas, quien responde a la ex candidata a gobernadora de la provincia, Carolina Píparo, tal como adelantó Buenos Aires/12.

Los otros tres representantes, el armador de Milei, Carlos Kikuchi, y los dos senadores elegidos por la sexta sección, Sergio Vargas y Silvana Ventura, fundaron su propio espacio. La división tiene clara sintonía con lo sucedido en Diputados, donde la división terminó en cuatro bloques. La coincidencia más elocuente es que los bloques mayoritarios, tanto en Diputados como en el Senado, no son los bendecidos por la comunicación oficial de LLA. 

En la Cámara baja, el grupo de nueve bancas que estará liderado por Gustavo Cuervo supera ampliamente al del diputado referente de los repartidores en moto, Nahuel Sotelo, que apenas pudo hacerse de un bloque con cinco legisladores.