El dueño de la red social X, Elon Musk, rechazó cualquier responsabilidad por la reciente invasión de la cuenta de la primera dama brasileña, Rosángela "Janja" Lula da Silva, quien a su vez acusó al magnate de intentar "minimizar" lo ocurrido.

La cuenta de X (antes Twitter) de Janja fue hackeada el 11 de diciembre, con insultos y mensajes "machistas", según denunció la propia primera dama brasileña.

La socióloga, de 57 años, dijo que pretendía "procesar" a la empresa y responsabilizarla por reaccionar con lentitud, al participar de la transmisión semanal en vivo del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.

Musk respondió, a su vez, a una noticia sobre la reacción de Janja: "No está claro por qué alguien que adivina su contraseña es nuestra responsabilidad", escribió en la plataforma que controla desde 2022.

El empresario aludió a una investigación de la Policía Federal, que derivó en la detención del supuesto hacker: un joven de 17 años de Brasilia que, según detallaron medios locales con base en informes policiales, dijo haber conseguido los datos de la primera dama en internet.

La respuesta de Janja

Según Janja, eso no se debió a un "adivino", como señaló Musk, sino a la falta de protección de los datos en la red social, escribió en una nota de prensa divulgada después del posteo del magnate.

Musk "minimiza un hecho grave que no solo me afecta a mí, sino a miles de mujeres dentro de su plataforma todos los días", añadió Janja.

Dijo que la plataforma debería "actuar lo más rápido posible cuando se comete un delito", y reclamó que las plataformas "siguen lucrando y enriqueciendo a sus dueños con base en discursos de odio contra las mujeres".

Según Janja, X demoró "más de una hora y media" para bloquear el acceso al hacker.

La primera dama, a quien Lula definió como un "agente político" que contribuye en el gobierno, denunció lo ocurrido como un acto de misoginia y prometió continuar "luchando por la responsabilización de las plataformas".