Santa Fe confirmó la tendencia nacional y, como la mayoría de las provincias, se pintó de amarillo PRO. El frente Cambiemos revirtió con holgura el resultado de las primarias para diputados nacionales y ayer se impuso primero en toda la provincia por una distancia que al cierre de esta edición superaba los doce puntos respecto del segundo más votado, el Frente Justicialista. De esta manera, se aseguraba cinco de las nueve bancas que Santa Fe debía renovar en el Congreso de la Nación. El peronismo logró colocar tres diputados. El Frente Progresista apenas mejoró dos puntos respecto de las Paso y consiguió entonces uno de los escaños en juego. El gobernador Miguel Lifschitz reconoció temprano la derrota, valoró en cambio los buenos resultados obtenidos en elecciones locales del interior santafesino y volvió a mencionar su intención de “abrir el Frente Progresista” a otros espacios para recuperar fuerzas de cara a 2019. A cuento de eso, anoche el candidato vencedor, Albor Cantard, dijo que “Cambiemos estará cerca de gobernar la provincia en 2019”.

En un comicio que transcurrió sin mayores complicaciones los santafesinos acudieron a las urnas para alterar en parte el mensaje de las Paso. Lo que estaba en juego era la renovación de nueve de las 19 diputaciones que Santa Fe tiene en el Congreso de la Nación. Los diputados que concluyen su mandato en diciembre son 5 macristas: Mario Barletta, Ana Copes, Luciano Laspina, Gisela Scaglia y Ricardo Spinozzi. También se van los socialistas Hermes Binner y Alicia Ciciliani, y los peronistas Josefina González y Eduardo Seminara.

De acuerdo con la tendencia de anoche, Cambiemos logró conservar su representación santafesina. Asumirán en diciembre los primeros cinco de la lista: Albor Cantard (UCR), Luciano Laspina (PRO, reelecto), Lucila Lehmann (Coalición Cívica), Gisela Scaglia (PRO, reelecta) y Gonzalo del Cerro (UCR). 

El peronismo santafesino sostuvo sus dos bancas y sumó una más. Por lo tanto, en diciembre asumirán Agustín Rossi -que vuelve al quehacer legislativo donde supo dirigir el bloque K de la Cámara Baja-, Alejandra Rodenas y Josefina González, que renueva mandato. 

El Frente Progresista resignó una de las dos bancas, puesto que sólo accedió al Congreso el primer candidato de la lista, el actual ministro de la Producción, Luis Contigiani, quien será el único legislador de ese espacio desde el 10 de diciembre.

Sobre el 94 por ciento de las mesas escrutadas, la lista de Cambiemos se imponía anoche por 38,12 por ciento de los votos, contra 25,53 del Frente Justicialista, que pasó a ser la segunda fuerza más votada, luego de que en las primarias del 13 de agosto superara al macrismo por 28,8 a 27,1. El Frente Progresista, en tanto, quedó muy atrás, tal como ya lo había previsto el resultado de las Paso. De aquel 11,96 registrado en la primaria, ayer la coalición santafesina apenas pudo aumentar un poco y llegar a 14,43 de los votos, más de diez puntos por debajo del PJ, y a 24 del macrismo.

Quedaron en el camino espacios menores que habían sorteado las Paso pero que no representaron ni dos dígitos en la torta electoral. El radical Jorge Boasso, afuera del armado de Cambiemos, no movió el amperímetro y cosechó 3,89 por ciento, menos que en las primarias. Lo mismo pasó con el concejal Diego Giuliano, que esta vez lo intentó con el massismo y arañó 4,52 puntos. 

Cuando al actual secretario de Política Universitaria le dijeron que la tendencia era irreversible, salió en el bunker partidario de Santa Fe a proclamar el “resonante triunfo” del macrismo en Santa Fe. Y cuando le preguntaron, Albor Cantard, ahijado político de Barletta y José Corral, afirmó que “en 2019 Cambiemos estará cerca de gobernar la provincia”.

Con el júbilo de los militantes, el diputado electo agradeció a los colaboradores que le ayudaron en la campaña. Cerró la noche observando el crecimiento: “Más de diez puntos respecto de las Paso y una ventaja de más de diez puntos sobre nuestro segundo competidor”, exclamó. 

Agustín Rossi se manifestó conforme con el resultado. Le restó importancia a la merma porcentual respecto de las Paso. “Estamos mejorando un 33 por ciento la elección de 2013, y de dos bancas que poníamos en juego terminamos ocupando tres”, destacó. En este sentido, celebró la decisión partidaria de haber reunificado al peronismo y haber ido a internas para después presentarse en una sola lista. 

Para entonces, Miguel Lifschitz, había reconocido en el hotel Savoy la derrota y valoraba haber mejorado un poco respecto de las Paso. En cambio, celebró las “muy buenas elecciones de concejales, intendentes y comunas en el interior”. El gobernador atribuyó el resultado a la tendencia nacional y llamó a “pensar y relanzar la gestión y también la estructura política”.