En medio del diluvio y los 30 grados, la estación de Constitución fue por tercer día consecutivo una odisea de personas que aguardaban con tedio su turno para registrar la tarjeta SUBE. Ante el colapso de la web y con los boletos mínimos del tren a $130 y el colectivo a $270, los usuarios hicieron filas interminables para no tener que pagar el doble de este valor, como sucederá con quienes no tengan la tarjeta a su nombre desde el 1º de abril.  

Érica salió de su casa en Chacarita sin paraguas y después del trabajo fue caminando bajo la lluvia a cargar y registrar la SUBE porque ya se había quedado sin saldo. "Estoy haciendo la fila hace una hora. Todo el día de ayer estuve intentando hacer el trámite online para no tener que venir hasta acá pero es imposible". 

Con el piloto amarillo escurriéndose en su mano, Walter era uno de los últimos de la cola. Terminó la jornada en el local que atiende como empleado y fue hasta la estación para registrar su tarjeta y la de sus hijos. "Ahora que arrancan las clases la empiezan a usar todos los días. Les voy a cargar hasta el tope pero espero que hagan algo con lo del sistema porque si no vamos a comernos esta fila cada dos semanas".  

La prisa con el registro de la tarjeta se debe a la fecha límite que dispuso la Secretaría de Transporte. De no llegar a nominalizar la SUBE antes del primer día de abril, los usuarios deberán enfrentarse a un mínimo de colectivo que pasará de $270 a $429,30, con el boleto más caro a $588,59; mientras que el mínimo de tren se irá de $130 a $260, llegando hasta $416 el valor máximo del boleto.

"Recién viniendo para acá vi a un par saltando el molinete y la verdad que tienen razón", expresó Candela, de 32 años, que hacía 40 minutos esperaba ser atendida en la ventanilla. Tuvo que venir presencialmente a Constitución para registrar la tarjeta porque "la página no responde, es desesperante". Consideró colarse en el tren "porque es un robo, está muy mal lo que están haciendo".

Santiago se toma el Roca todos los días desde Florencio Varela y de ahí tiene dos colectivos hasta llegar a su trabajo. Hace casi una hora estaba en la cola esperando para cargar la SUBE porque ahora "se me termina el saldo al toque". "Estamos cansados. Cancelan los trenes, viajamos muy mal, salís de laburar y tenés que estar acá una hora más porque ya no te alcanza la plata en la tarjeta".

Algunos de los que estaban haciendo la fila estaban al tanto pero otros se sorprendieron de la nueva medida del gobierno nacional para disminuir el subsidio a las empresas de transporte, que da lugar a una desregulación de las tarifas y alienta un modelo de libre competencia. Es decir, sobre el aumento lanzado hace dos días, podría sumarse otro mayor según lo disponga cada empresa.

"Estoy muy preocupada. Hoy escuchaba en la radio que el boleto puede llegar a irse a más de mil pesos. Yo me tomo cuatro colectivos. Estaría gastando cien lucas por mes para ir a un laburo en el que gano 400 mil. Es el mundo del revés", consideraba Rosario mientras hacía la fila por segunda vez, luego de que la caja donde estaba formando se cerrara porque se cayó el sistema.  

"No tenía idea", se espantó una vecina de San Justo mientras se llevaba una mano al pecho. "Pensé que esto era lo peor. No entiendo cómo vamos a hacer, cómo vamos a ir a trabajar. Es desastroso", expresó la mujer.

Igual que en Constitución, otros cientos de personas con la misma necesidad se dirigieron por la mañana a formar largas filas en las estaciones de trenes de Once, Tigre y Morón, donde se llevaron adelante operativos de registración de SUBE entre las 9 y las 14, así como se replicará mañana viernes 9 de febrero.