Sin proponérselo, el protagonista de clásicos del cine nacional como El lado oscuro del corazón y Esperando a la carroza ha hecho de la actuación un legado familiar. De hecho, Te esperaré es la tercera película en la que comparte cartel con su hijo Juan, tras la recientemente estrenada Retiro voluntario y Pescador, que llegará a la cartelera en 2018. Además, padre e hijos compartieron escenario en Mineros y pantalla chica en un capítulo de Televisión por la identidad. “Con mis hijas –Lucía y Laura– también laburé. Me encanta trabajar con ellos. Están muy preparados. Tienen más herramientas de las que tenía yo a esa edad. Eso hace que no me salga el padre de adentro, sino el colega. Se han preparado mucho más que yo”, subraya el actor. Grandinetti supone que no es casualidad que sus hijos hayan seguido sus pasos. “Evidentemente –señala– ellos vieron que yo la pasé bien con mi profesión. Nunca los estimulé a que sigan actuación. Tampoco les puse palos en la rueda. Les habré transmitido el placer del oficio sin darme cuenta, qué se yo... Como siempre desmitifiqué la profesión, creo que ellos pudieron zambullirse sin ningún complejo ni peso del apellido. No tienen un padre que dice sabérselas todas y que cuando no vende entradas o tiene bajo rating anda diciendo que el mundo no lo comprende. Habrán visto que yo disfruto del oficio”.