La Policía Federal concretó tres procedimientos de alto impacto en las últimas horas: detuvo a un integrante del clan Tripi, tras ubicarlo al descubrir que vendía drogas en cuatro minimarkets. Se trata de Alan, hermano del condenado Iván y del asesinado Leonel, y quien estaba prófugo de la justicia desde hacía cinco años. También fue detenida su novia.  Ayer la misma fuerza federal desbarató a la banda narco de "Yiyo" Ramallo que operaba en Rafaela y Morteros con apoyo de Los Monos. La pesquisa determinó que su líder manejaba la organización, proveedores y se relacionaba con el clan de la Granada desde la cárcel. En esa causa la Fiscalía federal de San Francisco detuvo a 23 personas en el marco de 46 allanamientos en la Perla del Oeste, Sauce Viejo, Suardi y Frontera junto a las localidades cordobesas de Morteros, Brinkmann y Porteña. En tanto el viernes por la madrugada la fuerza federal detuvo a la hija de Claudio “Pájaro” Cantero, el capo asesinado de Los Monos: Mía tiene 16 años. La menor fue liberada en el transcurso del viernes y entregada a su abuela. La Justicia federal investigaba una red de comunicaciones para apoyar a los jefes narco presos en Marcos Paz, y la joven sería un eslabón necesario de esa cadena. 

Alan Tripi fue detenido en la zona del Fonavi Parque Oeste, resultó detenido este viernes por la noche y es hermano de Iván, el más conocido de la banda, quien fue condenado en 2023 a siete años de prisión. A Alan y a su novia, Sofía L., los investigadores le atribuyen regentear cuatro locales tipo minimarkets donde, según la investigación, se vendía droga.

Según trascendió, la PFA interceptó a Alan Tripi en Teniente Agneta entre 27 de Febrero y Ocampo. Y luego encabezó ocho allanamientos en Rosario y Pérez. Según voceros de la investigación, Alan “cambiaba de autos” asiduamente para evitar ser interceptado. Las medidas fueron solicitadas por la Fiscalía Federal Nº 1, a cargo de Javier Arzubi Calvo y autorizadas por el juez federal Carlos Vera Barros. Al investigarlo, trascendió que ya contaba con un pedido de captura desde 2019. En rigor esta vez no hubo un secuestro significativo de drogas, aclararon los investigadores, que de todas maneras tenían documentadas maniobras de comercialización en un minimarket de Pérez, en Pasaje de la Flor. El comercio, indicaron, estaba a cargo de Sofía L., pareja de Alan, quien también resultó detenida.

La PFA irrumpió en un departamento del Fonavi de Monteflores al 6800; Rivarola al 6800; Pasaje Volta al 6900, Rouillón al 2100, en el Fonavi Parque Oeste, y en un quiosco 24 horas de Presidente Perón al 5100. Según trascendió, la fuerza secuestró 2 millones de pesos. Alan es hermano de Iván –detenido en 2020 y ya condenado a 7 años– y de Leonel, quien fue asesinado el pasado 27 de febrero en Cerrito y Teniente Agneta, en el marco de un raro contexto.

Horas antes del crimen había salido a la luz un escandaloso procedimiento. El 31 de enero tres policías le habían plantado tres pistolas utilizadas en balaceras –según peritajes– a un ladero de los Tripi, Alexis C. M., en un intento de inculpar a la banda en graves atentados a tiros cometidos entre diciembre y febrero.

Previo a ese episodio de "gravedad institucional inusitada", como describió un fiscal, los Tripi habían sido escrachados en mensajes que acompañaron balaceras, en un intento de exponerlos. La maniobra, se cree, fue cometida por una banda rival, aunque los autores no fueron formalmente identificados.

Yiyo y la Doña

El tanto el otro operativo con repercusiones en la provincia fue el que tiene a Evelio Horacio “Yiyo” Ramallo en el centro de la escena : es un preso de alto perfil alojado en la cárcel bonaerense de Ezeiza. En esta investigación de la fiscal federal de San Francisco, María Marta Schianni junto a su par Diego Iglesias de la Procunar quedó sindicado como el líder de una organización que conseguía estupefacientes de proveedores de Paraguay para luego distribuirlas para el narcomenudeo en localidades santafesinas y cordobesas. El viernes el juez federal de San Francisco, Pablo Montesi, ordenó 46 allanamientos, la mayoría fueron en Rafaela y Morteros (Córdoba), realizado por fuerzas federales que terminaron con 23 personas detenidas. Además, la pesquisa determinó que la mano derecha de Ramallo era una mujer que está presa en la cárcel de mujeres de Rosario y que tenía relación con personas vinculadas a Los Monos, a quienes le solicitaba apoyo para la comisión de hechos de violencia. Por eso se requisó la celda de  Eunice Febe “Doña” Trossero.

Los pesquisas determinaron que “una vez receptada la droga en la provincia de Misiones, arbitraba los medios necesarios para remitirla a la ciudad de Santa Fe, a través de personas que transportan la sustancia en colectivos de larga distancia, en encomiendas o envíos postales recibidos directamente en la ciudad de Rafaela. Allí era almacenada en diferentes domicilios a disposición de los imputados y distribuida, o retirada desde allí, sucesivamente, por los encargados de los puntos de distribución y responsables de los puntos de venta al menudeo, asentados tanto en misma localidad de Rafaela como en Frontera –en el límite con San Francisco–, en Morteros y Brinkmann, estas últimas de la provincia de Córdoba”.

Ayer se conocieron precisiones sobre lo secuestrado, los voceros de la Gendarmería aportaron que incautaron 49 dosis de cocaína, casi medio kilo de marihuana entre prensada y cogollos; elementos vinculados a su comercialización (recortes de nylon, nueve balanzas y sustancias de corte), más de 2 millones de pesos en efectivo, siete armas de fuego, municiones de distinto tipo y calibre, 56 celulares, un drone, una notebook, sistemas de monitoreo, como así también vehículos –dos autos y nueve motos– que habrían sido obtenidos a partir de la venta de drogas.

La hija del Pájaro

Finalmente la División Antidrogas Rosario de la Policía Federal Argentina realizó en la madrugada del viernes una serie de allanamientos en Rosario en los cuales detuvo a tres personas vinculadas a “Los Monos”. Una de las aprehendidas fue una de las hijas de Claudio “El Pájaro” Cantero, el asesinado líder y fundador de la organización criminal, cuyo hijo “Lucho”, hoy preso en la cárcel de Marcos Paz, tal como su tío “Guille”, lidera una de las actuales facciones. Se trata de una adolescente de 16 años, que con el correr de las horas recuperó la libertad y fue entregada a su abuela. Los otros dos sospechosos son una mujer que también es familiar del capo narco y un hombre.

“Cuando necesitaban comunicarse con sus subordinados para dar directivas, llamaban a estas mujeres, quienes, a su vez y sin cortar la comunicación, conectaban ‘en conferencia’ a los jefes con la persona que recibía las indicaciones. De esta manera preservaban la identidad de sus subalternos mientras utilizaban las líneas fijas del penal solo habilitadas para llamar a familiares registrados”, informaron fuentes oficiales. Las llamadas se daban a través de la línea fija del penal, ya que los Cantero no poseen celular en su encierro.