El fútbol argentino se mueve entre luces y sombras, en este último tiempo. Mientras el título de campeones del mundo pone a la Albiceleste en lo más alto, como contrapartida no paran de sucederse, semana a semana, denuncias de abusos que tienen como protagonistas a diferentes futbolistas o referentes de los clubes. Este lunes cobró notoriedad, nuevamente, el caso de Florencia Marco, jefa de prensa del equipo femenino de Boca, quien había denunciado a Jorge Martínez por abuso sexual. Sucede que el abogado del exentrenador pidió la recusación del juez y la nulidad del juicio, el mismo día que debía conocerse el fallo y retrasó todo el proceso judicial.

"Los fundamentos de la recusacion son muy claros. El señor juez, a lo largo del debate oral del día viernes, se tomó la atribución de pasar a ser un fiscal de la causa, no un juez imparcial. Haciendo preguntas inducidas, insistentes, capciosas. Todo para intentar obligar a los testigos a que afirmen una situación que nunca existió", argumentó el letrado Ángel Romero al cuestionar la labor del magistrado Sergio Paduczak, durante el juicio oral que inició el pasado viernes.

Martínez, por su parte, también se expresó y aseguró que "vamos a denunciar al juez por irregularidades y vamos a pedir la nulidad del caso". "Pasaron 15 testigos y nadie acreditó tocamiento. ¿Por qué me denuncian? Habría que preguntarle a la señorita (Florencia) Marco", agregó el exfutbolista de Independiente, River, Boca, Chicago, Olimpo y Platense.

La denunciante se había mostrado confiada en el proceso judicial, previo a conocerse este pedido de la defensa del acusado: "Estoy tranquila, creo que hoy va a ser un día en el que la verdad va a salir a la luz, y se va a hacer justicia pese a este pacto de caballerosidad entre los miembros del Consejo de Fútbol. Lo espero no solo por mí, sino por todas las personas que pasaron y pasan por esta situación", afirmó Marco.

No obstante, tras ser notificada del petitorio, la mujer se retiró entre lágrimas. Ahora, la jueza Patricia Elisa Cusmanich será la encargada de hacer lugar o no a la solicitud de la defensa en las próximas 48 horas y, en caso de aceptarla, será quien tomará la causa.

El caso 

Marco acudió a la Justicia en marzo de 2023 tras la indiferencia con la que Boca trató su denuncia, efectuada en primera instancia ante el departamento de Inclusión y Género del club, presidido por Adriana Bravo, también vicepresidenta 3ª de la institución. La denunciante les había advertido en febrero a las autoridades de Boca que durante 2022 había sido acosada, abusada y manoseada por Martínez, pero el club le pidió que se tomara una licencia y dejó que el técnico siguiera en sus funciones al frente del equipo femenino. 

Cuando pasó más de un mes y la situación no cambiaba, la periodista presentó su denuncia en los Tribunales. Recién entonces, Boca licenció a Martínez.

“Me descuidaron y me desprotegieron, y protegieron y cuidaron al abusador. Bravo estaba en el día a día y veía lo que estaba pasando, esa es la parte que más me duele. La persona que tenía que cuidar a las víctimas las exponía y las ponía en peligro, y encima había menores de edad. Yo tengo el teléfono de siempre y, una vez que presenté la denuncia, nunca me llamaron. Y cuando la denuncia no estaba presentada de manera formal, tampoco atendían mis llamados”, contó Marco en una entrevista reciente. 

El delito de abuso sexual simple prevé penas de cuatro meses a seis años de prisión. Antes de reconvertirse en técnico, Martínez tuvo una extensa trayectoria como futbolista: entre 1993 y 2010 fue defensor del propio Boca, River e Independiente, entre otros equipos, y en 1997 llegó a jugar tres partidos para la selección argentina.

Sombras

La "desatención" o insensibilidad institucional de Boca resulta una paradoja si se tiene en cuenta que el Club de la Ribera es el mayor campeón del fútbol femenino de Argentina, con 28 títulos en su historia –los últimos cuatro de manera consecutiva- contra 11 de su perseguidor más cercano, River. 

Además, Las Gladiadoras, como se apoda al conjunto femenino Xeneize, también son el único plantel del país integrado únicamente por jugadoras profesionales, mientras que en el resto de los equipos alternan futbolistas amateurs. Esto da cuenta de la importancia que le otorga la institución. 

Asimismo, es preciso considerar el contexto del fútbol argentino en su totalidad, puesto que el juicio oral contra Martínez se lleva a cabo en un momento de multiplicación de denuncias contra futbolistas y otros actores masculinos del fútbol argentino: la semana pasada, cuatro jugadores de Vélez Sarsfield quedaron detenidos en Tucumán, tras haber sido denunciados por una periodista local de abuso sexual con acceso carnal. A la espera del juicio, el club porteño ya les rescindió el contrato. 

A los pocos días, se conoció que dos jugadores de Godoy Cruz de Mendoza también fueron arrestados por abusar de una joven.

Y no hay que olvidar los casos ya conocidos: el exdelantero de Boca, el colombiano Sebastián Villa –actualmente en Bulgaria-, fue condenado el año pasado a dos años y un mes de prisión –en suspenso- por violencia de género contra Daniela Cortes, su expareja.

Además, dos habituales futbolistas de la Selección, Thiago Almada y Gonzalo Montiel, afrontan denuncias en la Justicia por violencia sexual en diferentes hechos. Almada, antiguo delantero de Vélez y actualmente en Atlanta United de Estados Unidos, es investigado por un supuesto abuso doblemente agravado ocurrido en 2020, mientras que Montiel, hoy defensor del Nottingham Forest de Inglaterra y antiguo jugador de River, fue imputado el año pasado por el supuesto delito de abuso sexual con acceso carnal, agravado por la participación de dos personas. Ambas causas siguen abiertas.