Luego de que la familia de Abril Bogado, la niña de doce años asesinada el último domingo en la ciudad de La Plata, se comunicó con el Centro Unico Coordinador de Ablación e Implante de la Provincia (Cucaiba) para donar los órganos de la víctima y una radio porteña vinculase esa intención con un inminente transplante de corazón para Justina Lo Cane –otra chica de doce años, registrada en lista de espera en el Incucai–, el propio organismo provincial encargado de la procuración de órganos, debió salir a desmentir esa información: “(Bogado) no reunía las condiciones para ser donante de órganos para trasplante”, aclararon en un comunicado. El transplante de órganos, de acuerdo con la Ley nacional 24.193 que regula esa actividad, debe ser anónimo tanto para el donante como para el receptor y la asignación a los pacientes en lista de espera se decide sólo bajo criterios médicos.

La noticia había explotado en el mediodía de ayer. Radio Mitre difundió que los padres de Abril Bogado, minutos antes del funeral de su hija, habían decidido donar el corazón de ella a Justina Lo Cane, internada en la Fundación Favaloro. De forma veloz, la versión fue reproducida por varios portales de internet y llegó de inmediato a las redes sociales, donde aquella información se convirtió en tendencia mundial.

En esas circunstancias, Cucaiba debió informar, mediante un comunicado, que “el equipo del Servicio Provincial de Procuración concurrió al hospital de Niños Sor María Ludovica, donde estaba la niña de 12 años, para su evaluación neurológica” y agregó que “debido a la inestabilidad hemodinámica de la niña, hecho que la llevó a un paro cardíaco irreversible, circunstancia que imposibilita la donación de órganos”. El domingo 5 de noviembre, cuando regresaba con su familia de una fiesta de casamiento, Abril Bogado fue baleada por dos hombres que intentaban asaltar a su familia mientras estacionaban el auto.

La familia de Justina Lo Cane también publicó ayer, en el muro de Facebook La Campaña de Justina, que “no habían recibido comunicación ni ningún tipo de contacto por parte del Incucai” para un posible transplante de corazón. Con distintas actividades, la familia de la niña internada en la Fundación Favaloro lleva adelante un trabajo de concientización para la donación de órganos, donde en ningún momento se individualiza el transplante (algo prohibido por ley) sino que busca aumentar el registro de donantes. Hasta el cierre de esta edición, el Incucai tiene anotados 7859 pacientes en lista de espera y, en todo el 2017, se completaron 1265 intervenciones, entre órganos y tejidos.

Por último, la Policía Bonaerense detuvo a dos hombres sospechados del asesinato de Bogado, quien practicaba gimnasia artística en un club platense. De acuerdo con los investigadores, al momento de su arresto, uno de los detenidos confesó el crimen ante algunos testigos, aunque ese testimonio no tiene validez jurídica. Luego, según la versión policial, el hombre intentó escapar de los agentes, fue baleado y quedó internado en el Hospital de Gonnet, en La Plata.