El alemán Sebastian Vettel puso ayer fin a la sequía de triunfos que mantenía desde finales de julio, al imponerse en el Gran Premio de Brasil. Con esta victoria, el piloto de Ferrari dio un importante paso para terminar segundo en la temporada (que concluirá el próximo 26 de noviembre en el Gran Premio de Abu Dhabi, Emiratos Arabes Unidos), al sacarle 22 puntos a su inmediato perseguidor, el finlandés Valtteri Bottas, quien finalizó segundo en el circuito de Interlagos.
El germano hizo una gran largada desde la segunda posición para adelantarse a Bottas –que había obtenido la pole el sábado–, y liderar casi de punta a punta una carrera en la que el ya consagrado campeón mundial Lewis Hamilton finalizó cuarto, tras largar desde la última posición con su Mercedes debido a una clasificación accidentada.
Vettel, campeón de la categoría en cuatro ocasiones, ganó tres de las primeras seis carreras del campeonato y parecía aspirar a su quinta corona, pero una racha de tan solo una victoria en los siguientes 11 circuitos le abrió el paso al piloto británico, que remontó la diferencia inicial y lo superó ampliamente para ganar su cuarto título mundial.
El dato de color lo tuvo como protagonista al local Felipe Massa, que terminó séptimo, y corrió por última vez ante su público, ya que se retirará definitivamente al final de esta temporada. Al terminar la carrera, el local dio una vuelta extra en su Williams sosteniendo la bandera brasileña mientras recibía la ovación de los espectadores.
