Las vacunas constituyen, quizás, el principal invento de la humanidad. De hecho, junto a la potabilización del agua, se ubica como una de las tecnologías que, a lo largo de la historia, más contribuyó a la supervivencia y el progreso de las sociedades. Sin embargo, en el presente, las tasas de vacunación disminuyen y emergen enfermedades que se creían erradicadas. Todo gracias a que las personas y