El final de temporada ayer para Newell’s volverá a poner el foco en la dirigencia de Ignacio Astore. Porque más allá del buen desempeño del equipo en las últimas fechas, el club hizo otro mal torneo en el fútbol argentino y a su andar errático hace años se le añaden ahora las deudas en la administración de la tesorería de la institución, con jugadores que fueron vendidos pero aún no se reconece. El caso de Mateo Silvetti es el más grave. Colaboradores del presidente admiten que su pase fue transferido a un grupo empresario en febrero por cinco millones de dólares pero Astore lo negó en un comunicado oficial. La palabra del presidente carece hace tiempo de credibilidad en el parque Independencia y se espera que la dirigencia entregue información verídica sobre la situación del juvenil en los próximos días, más allá de que es un hecho que Silvetti no volverá a vestir la rojinegra. El plantel de Cristian Fabbiani tendrá algunos días de descanso dado que para los leprosos la actividad oficial comenzará con el torneo Clausura, que dará inicio el segundo fin de semana de julio. El debut de la Lepra en el próximo campeonato será en Mendoza ante Independiente Rivadavia y de local la semana siguiente ante Banfield.
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