Si existiera un mazo de cartas Match 4 sobre autos de colección y series televisivas, uno de los naipes más fuertes sería el de Duster (estreno por Max el próximo jueves a las 22 hs). De hecho, su nombre se debe al fierro de la marca Plymouth modelo ‘70, anaranjado y con las tomas de aire en el capot. Es también una historia de venganza encabezada por la primera agente negra del FBI y un cancherísimo delivery de una asociación criminal de Arizona. La entrega de ocho episodios, creada por J.J. Abrams (Lost) y LaToya Morgan, invita a viajar a velocidad crucero, sabe cuándo pisar el acelerador a fondo o detenerse en un diner para descansar. "J.J. no paraba de contarme sobre una imagen que tenía en su cabeza desde hace dos décadas: hay un teléfono en el medio de una carretera. parece un tipo rudo de la mafia, atiende y emprende su viaje. "Creo que Josh Holloway podría hacerlo", me dijo. Ese fue el comienzo de todo", confiesa su showrunner en una conferencia de prensa de la que participó Página/12.
Al volante de este relato, seteado antes de la crisis del petróleo, está Jim Allison (Holloway). Un diablo de las rutas del suroeste de los Estados Unidos. Habilidad necesaria para alguien que debe transportar cosas sin preguntar demasiado, sean sobornos a la policía o corazones para un trasplante. ¿Su empleador? Ezra Saxton (Keith David) el mandamás de una red criminal de Phoenix con la tapadera del transporte de camiones. Desde un primer momento queda claro que al piloto le gusta quemar llantas y aceite, exhibe un fuerte sentido de la lealtad, y que su sonrisa pícara más el calce de sus jeans le han abierto muchas puertas. Lo que desconoce es que a su tanque de espíritu libre no le queda mucha nafta. Ahí es donde aparece la oficial Nina Hayes (Rachel Hilson), la oficial del bureau a la que le asignaron este caso “porque no quedaban otras opciones”. Esta negra, mujer y novata, está destinada a formar una pareja dispareja con Jim. “¿A dónde vamos?”, le dirá Jim a la joven en su primer encuentro arriba de su fibrosa cupe. "Siempre quisimos que sea un auto con peso. Nos acordamos del General Lee de Los Duques de Hazard, Kit de El auto fantástico, más acá en el tiempo el Dodge Chager de Vin Diesel de la saga Rápido y Furioso. Queríamos un auto así de emblemático para Jim. Investigando un poco en los '70, el Duster ya tenía esta proyección de coche cool y rudo, le ayuda mucho que solo lo construyeron durante seis años. Esa fue nuestra llave. Tener un auto que emane la misma vibra que su protagonista", explica Morgan.
El protagonista no quiere ser un soplón de la mafia y ella tiene un motivo personal en esta misión. "Mi personaje acaba de salir de Quantico, recién egresada del FBI, y tiene que ir a Phoenix con una agenda personal", cuenta Hilson. "Jim es un conductor de la mafia en 1972, ey, eso ya de por sí es muy divertido", explica Holloway. Son “aliados improbables” con un enemigo en común. Un poco de comedia explosiva por acá, algo de blaxploitation, pero con la tracción obvia por ese subgénero en el que mandan los escapes y las colisiones. Es como si los personajes se pusieran la máscara de Burt Reynolds y Pam Grier en los años que colmaban las salas de cine, para sorprender con algunos matices. Holloway, quien supo encarnar a un héroe modélico en Colony, ahora retorna con un criatura que recuerda al Sawyer de Lost, un sureño al que nunca se le puede sacar la ficha. “Me encanta caminar por la línea entre el bien y el mal y cómo cambia todo según la perspectiva. (…) Así fue como me metí en el personaje. Me gusta estar en ambos lados”, sentencia el californiano.
Se trata de un policial rutero que nunca oculta sus credenciales ni los homenajes al estilo de lo visto en A prueba de muerte (Quentin Tarantino; 2007) o la remake de Vanishing Point (Charles Robert Carner; 1997). Su puesta en escena reluce con el expertise de calle Warnes más las postales de ese estado fronterizo con México. La banda sonora (¡pasamagazine incluido!) destila garaje rock (The Sonics y The Hollies) más bastante funk rabioso. Duster, entonces, debe tomarse como uno de esos autos de colección que venden en los kioscos de diarios. Reproducción ficcional explícita que sacaron de su envoltorio, y tal como se muestra en la exuberante, infantil y fascinante apertura, pusieron a los autitos chocadores a jugar.
Programados
* ¿Policial de procedimiento canino? La mezcla exacta de esos dos subgéneros le daan sentido a Hudson & Rex, cuya segunda temporada acaba de estrenarse por AXN (se emite los jueves a las 22). La producción canadiense sigue al oficial (John Reardon) y su compañero, un ovejero alemán con el que resuelve casos variopintos. No solo eso, aquí el mundo del podcast, el cine independiente y las redes sociales se convierten en nuevos escenarios de intriga. Guau.
* Dos de Apple TV+. Junto a la confirmación de una segunda temporada para The Studio, se anunció el estreno de Stick: el swing perfecto para el próximo 4 de junio. En esta comedia golfística, protagonizada y producida por Owen Wilson, el rubio encarna a una vieja promesa de ese deporte cuya carrera se descarriló hace dos décadas. Divorciado y desempleado, Pryce Cahill apuesta por completo a un pichón de crack. Redención, hoyo en uno o irse a la arena.
* Las hermanas sean unidas. El próximo 29 de mayo, Prime Video le dará lugar en su grilla a The Better Sister, un drama criminal protagonizado por Jessica Biel y Elizabeth Banks. En ocho episodios se exploran los terribles sucesos que separan a Chloe (Biel) y Nicky (Banks), hasta que una muerte las llevará a reencontrarse.
El personaje
Nick Callan de Las cuatro estaciones (Steve Carell). Vendedor de seguros de pensión casado con Anne. Más allá de su profesión, está seguro de otra cosa: tras un cuarto de siglo su matrimonio se ha acabado. “Ojalá fuéramos compañeros de cuarto, somos como colegas en una central nuclear”, sentencia el hombre que quiere vivir un par de veranos sentimentales más.