El Padre Juan Carlos Molina de la Diócesis de Avellaneda estuvo hoy domingo en la Plaza de San Pedro en la asunción del Papa León XIV y en diálogo con la 750 relató el histórico momento que le tocó vivir.

Para la Iglesia Católica siempre es un tiempo bien intenso. En este caso, lo acompañamos tras la muerte del Papa Francisco, algo que como argentinos nos golpea durísimo. Sentimos la orfandad que nos deja. Después, es un tiempo de discernimiento fuerte, porque sirve para sintetizar lo que fue el papado anterior y revisar qué necesita la Iglesia para este nuevo tiempo. La elección del Papa León XIV fue una sorpresa, y creo que es una gran oportunidad”, afirmó el sacerdote.

Consultado acerca de cómo fue la experiencia de vivir la primera homilía del nuevo Santo Padre, Molina afirmó que estar en la Plaza de San Pedro fue “tocar un poco el misterio de la Iglesia católica”.

“Uno encuentra ahí a grandes personalidades de todo el mundo. A veces, a los católicos nos pasa que, frente al mundo occidental que se descristianiza, podemos sentir que la Iglesia pasa de moda; sin embargo, en estas situaciones descubrimos que la Iglesia como organización sigue estando presente en el corazón de Occidente. Eso es interesante”, señaló.

“Por otro lado, yo siempre digo que se puede tocar el misterio de que somos una Iglesia universal. Que siendo tan distintos, con tradiciones culturales tan diversas, la fe en Jesús nos hace sentir parte de lo mismo. Y eso es hermoso”, agregó.

Por último, el sacerdote que vive hace poco más de año y medio en Roma, sostuvo que, si bien había mucha gente reunida para escuchar por primera vez a León XIV, fue un poco menos que en la despedida de Francisco.

“Había muchísima gente, no sé cuántos exactamente. Pero leí que había entre 100 mil y 150 mil personas. La plaza estaba prácticamente llena, y también había mucha gente en la Vía de la Conciliación. De todos modos, tengo que decirlo con un poco de orgullo argentino, que había un poco menos que en el funeral del Papa Francisco, que hubo 250 mil personas en la plaza. Esta es mi primera vez en un evento así. Estoy viviendo en Roma poco más de un año y medio. Es la primera vez que me toca vivir en esta ciudad la muerte de un Papa y la elección de uno nuevo”, cerró.