“Esa entrada siempre termina siendo un cuello de botella durante las horas pico donde muchas veces se pierden más de 20 minutos, si no vas con una moto. La obra para ampliar el puente era algo que pedíamos hace tiempo porque cada vez hay más vehículos en la zona. Esperemos que sirva para solucionar esto de manera permanente”, afirma Nicolás, vecino de San Miguel, sintetizando una de las demandas más reiteradas en la zona: la necesidad de mejorar con urgencia la circulación vehicular entre San Miguel y Hurlingham.
Con ese telón de fondo, avanza la construcción de un nuevo puente vehicular sobre el Río Reconquista, una obra vinculada la conectividad regional y la movilidad diaria de más de 165 mil personas. El proyecto, desarrollado por el Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos de la Provincia de Buenos Aires, busca resolver uno de los principales problemas de embotellamiento urbano del noroeste del conurbano, de acuerdo a lo informado desde la propia cartera bonaerense.
Ubicado sobre la Avenida Gaspar Campos, el actual puente cuenta con un carril por sentido, insuficiente para absorber el caudal creciente de vehículos que lo cruzan cada día, según detalló el vecino que suele utilizar esta ruta diariamente. La obra en marcha contempla la incorporación de otro puente y actualmente lleva un avance del 50 por ciento. El nuevo diseño incorporará dos carriles por mano, lo que permitirá una circulación más fluida en ambos sentidos, según la información oficial.
La Avenida Gaspar Campos es uno de los accesos más utilizados para ingresar y salir de San Miguel. Esta arteria conecta con el Camino del Buen Ayre, un corredor fundamental para quienes se dirigen hacia la Panamericana, el Acceso Oeste o incluso la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Por su ubicación, el paso sobre el Reconquista no solo sirve a los vecinos de San Miguel, sino también a una gran cantidad de usuarios del transporte privado y público que cruzan a diario desde Hurlingham, Bella Vista y William C. Morris.
El impacto de esta intervención también se refleja en el entorno urbano. Desde la Municipalidad de San Miguel, informaron que se está ejecutando un conjunto de obras complementarias que buscan optimizar el ingreso al distrito desde el Camino del Buen Ayre. En el barrio Obligado, se completaron pavimentaciones en varias calles que antes eran de tierra.
Uno de los proyectos más significativos en la zona que señalan desde el gobierno local es la rotonda construida en 2023 en la intersección de Gaspar Campos y Río Segundo, a poca distancia del puente, para darle un ingreso directo al barrio Obligado. Antes, los vecinos tenían que hacer varias cuadras para poder poder doblar en la avenida e ingresar al barrio.
Si bien la obra ayudó a reorganizar el tránsito, no pudo escapar al problema de raíz de la congestión vehicular y en el último tiempo también afectó, en menor medida a la rotonda, según manifestaron los vecinos. La combinación de un puente estrecho, accesos complejos y una red vial saturada generara demoras frecuentes, especialmente en los horarios de entrada y salida laboral, como anticiparon. Aunque la rotonda trajo una mejora, la expectativa está puesta en la finalización del nuevo puente en San Miguel.
Los vecinos solo piden por un "trabajo a conciencia sobre la misma". “No sé si alguien había hecho un reclamo formal, pero la verdad es que en el barrio lo pedíamos hace mucho. Es una entrada con bastante circulación y cada vez hay más autos. Esperemos que la obra funcione de verdad y dure bastante”, expresó Maximiliano, otro conductor que circula habitualmente por la zona, al ser consultado por Buenos Aires/12.
Por otro lado, el municipio anunció otras medidas viales previstas que incluyen la apertura de una colectora sobre la avenida Gaspar Campos y un nuevo camino alternativo que conectará la rotonda con la intersección de Salta y Monzón. Esta vía adicional está pensada para aliviar la carga vehicular sobre la avenida principal y mejorar la conexión de barrios en expansión.
“San Miguel tiene alrededor de 330.000 habitantes. Esta es una de las entradas más utilizadas por quienes necesitan trasladarse diariamente, ya sea hacia la Capital o hacia otras zonas del Gran Buenos Aires. La ampliación del puente y todas las obras complementarias apuntan a hacer más eficiente y seguro ese recorrido”, completaron desde el municipio.