El conflicto de los trabajadores municipales con la administración local de Pablo Javkin escaló a tal punto, y de manera inédita, que ayer al mediodía intervino la cartera laboral de Provincia para dictar la conciliación obligatoria y retrotraer la escena a la previa del viernes, antes de que el Sindicato liderado por Antonio Ratner anunciara un par de 48 horas para este miércoles y jueves, y que el Ejecutivo aplicara de manera unilateral un aumento por decreto. La medida siempre implica que se suspenden todas las reacciones, tanto patronales como gremiales; sin embargo al cierre de esta edición el sindicato no había confirmado que el paro se levantará. Hoy se verán las caras en el Ministerio de Trabajo.
La pelea de fondo son las formas y los rumbos que tomó la paritaria, reanudada luego de marzo. Ante un tire y afloje sin acuerdo, el Ejecutivo quiso esperar a que la Casa Gris definiera su oferta salarial con estatales y docentes, y luego quiso proponer el mismo aumento: 8% para el segundo trimestre del año, escalonado en tres tramos.
El sindicato se anticipó a la jugada y rechazó de plano la intención del municipio, porque antes de pasar a discutir el aumento para el segundo trimestre del año, exige que se contemple el 9,5% perdido por el salario respecto de la inflación durante el primer.
Un airado acto de protesta frente al Palacio de los Leones caldeó el escenario y el intendente lo contestó con una denuncia penal por uso indebido de ambulancias del Sies para cortar el tránsito para ese mitin. Tras ello, el gremio clavó un paro de actividades el martes de la semana pasada, con un acatamiento disparo por imperio de la amenaza de Intendencia de descontar el día a quienes adhirieran la medida.
Javkin desde entonces consideró que el diálogo estaba roto y resolvió aplicar el aumento salarial por decreto, sin esperar que el gremio opine. Previsiblemente, la opinión fue negativa. No obstante, la Municipalidad pagó los sueldos y, unos días después y por planilla complementaria, abonó el aumento dispuesto por el Ejecutivo.
Los trabajadores volvieron a realizar una asamblea estentórea el viernes frente a la sede municipal, y denunciaron aprietes diversos de las autoridades para con los empleados para que se aparten de la senda gremial. Además, también pusieron de relieve condiciones laborales por mejorar y reclamaron una mejora salarial superior a la propuesta conservadora.
En ese marco, Ratner bajó el martillo y anunció una huelga de 48 horas a cumplirse este miércoles y jueves en todas las dependencias municipales de Rosario.
A la par, el propio gremio municipal acudió al Ministerio de Trabajo. En una carta dirigida al ministro Roald Báscolo, pidió que dicte la conciliación obligatoria "en carácter de urgencia" ante la intransigencia del Ejecutivo municipal. De esa manera, requirió la medida al amparo de la ley nº 10.468, que neutralice el decreto polémico del intendente para aplicar de manera unilateral el aumento salarial ofrecido. "Es una grave e inadmisible práctica antisindical, discriminatoria y vulneradora del derecho constitucional de huelga", planteó la posición gremial.
El sindicato exigió que la orden ministerial suprima la decisión de Javkin. "El pasado lunes, el intendente Pablo Javkin anunció un aumento salarial del 8% por decreto para los trabajadores municipales de Rosario y había salido al cruce del sindicato que los nuclea, advirtiendo que descontaría el día a quienes no fueran a trabajar el martes, día elegido por el gremio para la convocatoria de un paro", planteó la carta firmada por Ratner y su comisión directiva, en referencia a los sucesos de la semana pasada.
Pese al aviso de un nuevo paro, Ratner concedió hasta hoy a Javkin la posibilidad de retroceder el decreto y sentarse a negociar. Pero la conciliación obligatoria salió antes y ahora el encuentro será hoy en la cartera laboral.
"El Ejecutivo tiene que dejar de amenazar a los trabajadores y de hacerles sentir el rigor del poder de las instituciones. Que el Ministerio de Trabajo no nos haya convocado fue porque el poder político le dijo al ministro que no nos convoque", reprochó el dirigente en un momento en que se encontró vacío de interlocutores ante el reclamo gremial.
A la consulta en fuentes del Sindicato de Trabajadores Municipales luego de la intervención ministerial, ninguna fuente confirmó que el paro se levantó. Es que, en marco general, es la propia federación del sector (Festram) la que mantiene el llamado a un paro de 48 horas para esta semana en todos los municipios y comunas de la provincia de Santa Fe. La protesta incluye movilizaciones y, en Rosario, una carpa de resistencia frente al Palacio de los Leones.