¿Cuáles son los mecanismos que permiten afirmar: "Es cómico"? En lo cómico está la suspensión de un juicio. Surge una escena, se considera cómico y puede hacer reír. Aparece una brecha que no estaba allí un momento antes. Este desfase es el resultado de un juicio sobre la escena propuesto a la vista y al entendimiento, según el actor o el espectador. Este momento puede congelarse. La situación se convierte en una insignia particular que puede ser única o recurrente. El efecto cómico es una lupa y el arte del payaso, así como el del burlesque, explota el trazo, la resalta, la reitera, para fijarla para el momento del reír.
Si, como con el Witz, se necesita una escena con tres personajes, dos pueden ser suficientes. Por otro lado, a diferencia del Witz, no es seguro que lo cómico toque lo sublime. Es más bien una grieta en lo Real. El juicio recae sobre este punto de real visible y escuchado.
"La comedia no es lo cómico". La escena está trazada en cuanto a cómo tratar a otro ser humano. Y esto se lleva la aprobación del espectador, es gracioso.
La palabra graciosa. Ésta ha permanecido ambigua durante siglos. Hombre gracioso, gracioso inquietante o gracioso malo, no era raro referirse a niños con comportamientos perturbadores de esta manera.
Una diversión platónica. En el Seminario VIII sobre la transferencia, Lacan retoma el texto de El Banquete y se detiene en los seres esféricos de Aristófanes. Evoca la solución de Zeus de cortar por la mitad una esfera demasiado perfecta. Observemos que Platón aloja en la esfera "la envoltura de todo lo que puede estar vivo. En consecuencia, es lo viviente por excelencia", agrega Lacan. Pero cortar la esfera en dos no produce el efecto deseado en el hombre.
El resultado es un desorden tal que corre el riesgo de llevar a la desaparición de la especie. Lacan señala que: "además de este mecanismo de doble gatillo consistente en hacerle hacer de bufón al personaje que para él es el único digno de hablar del amor, resulta que, en el discurso de Aristófanes, Platón da la impresión de divertirse llevando a cabo un ejercicio cómico sobre su propia concepción del mundo y del alma del mundo".
Esta lupa siempre está presente en lo cómico. Cuando Lacan retoma este pasaje, asocia la versión de Aristófanes con la de Hans: "desatornillarán el genital que tienen en el sitio equivocado, porque se encuentra en el lugar donde estaba cuando eran redondos, en el exterior, y se lo atornillarán de nuevo en el vientre".
Lo cómico pone de manifiesto la relación del falo con la castración. ¿Cómo es esto suficiente para concluir que es cómico? El falo, despojado de sus semblantes, deja al objeto de goce sin un resorte simbólico.
Siempre hay un elemento de trivialidad en lo cómico. Muerde el cuerpo. De este mordisco la escena toma su fuerza cómica.
¿Podríamos decir que lo cómico desmonta los mecanismos de la fascinación y nos permite juzgarnos, vernos sin sufrir demasiado? Sin embargo, lo que se revela en el efecto cómico muestra lo mal hecho que está esta parte viviente.
Lo cómico tiene esa cualidad de desfascinar, de moverse en su enredo para creerse en un lugar concreto. Aquí el espectador está en todos los lugares a la vez, y la diversión surge de un punto en el que el parlêtre es tratado por su Otro.
*Fragmento. Del blog Psicoanálisis Lacaniano. Publicado el 23/05/2025.