En un duro editorial, el periodista y conductor de La Mañana, Víctor Hugo Morales, cuestionó a los principales referentes del Gobierno y se preguntó si en el futuro la sociedad será capaz de creer que estos personajes circenses estuvieron todos al mismo tiempo manejando sus vidas.

El editorial de Víctor Hugo Morales

Iván Noble dice que será muy difícil aceptar, dentro de algunos años, que estas criaturas fueron verosímiles. Lo dijo a partir de ver a Lemoine molestando con insultos a les jubilades de la marcha de ayer.

Lemoine que vive su destino como si lo mereciera, diputada y principal referente parlamentaria junto a Menem. ¿Y Menemcito? ¿Cómo podíamos pensar años atrás que había otro y era peor? Más bandidito, regala su sueldo y hace millones en negocios de sus empresas de seguridad y limpieza, en contratos con el Estado.

¿Qué decir de la vecina de Cristina de Juncal? Dijo que lo de CFK pudo ser un autoatentado. Y reconoció que su departamento era una trinchera de Revolución Federal. Dice lo mismo que Millman. ¿Podemos creer, no en el futuro, somos capaces de creer hoy que existe Millman?

Yo me acuerdo de viejas lecturas cómo el capitalismo se asentó cuando las corporaciones hicieron que la gente quisiera cosas que no necesitaba. Desató el consumismo. Vinculaban los productos con los deseos inconscientes de las masas.

Satisfaciendo los deseos íntimos egoístas de la gente, se los hace más felices. De momento. Así que Lemoine, la vecina de Juncal, Menemcito y el fenomenal Millman, siendo personajes circenses de principios del siglo XX, son justamente las resultantes de aquella manipulación.

Porque la gente volverá a votarlos. Millones votan a Lemoine. Votan a Trump. Deliran con Milei. Esas multitudes fueron preparadas en un laboratorio mediático que primero las enfermó de mentiras, luego alentó su odio y por último calló frente a todos los atropellos.

La mafia de Clarín, la subsede de La Nación, hablan de los disturbios de ayer. De Lemoine yendo a provocar no hay nada. De los palos en el piso a una jubilada o la niña con gas pimienta en los ojos, nada. Porque siempre le echan la culpa a las víctimas de las Lemoine y los Millman.

Salvo que se les suban los humos (como a Milei, que niega Telefónica a Clarín) y le instalan en la tapa el déficit externo de cinco mil millones. O lo extorsionan con Libra. Fuera de eso, nunca van a tener problema con los medios.

Porque el horóscopo a Magnetto siempre le da que es un buen mes para robar y mandar gente a la cárcel. Tiene la felicidad al alcance de la mano. Aproveche junio y los otros once meses.

¿Alguna vez seremos capaces de creer que estos personajes estuvieron todos al mismo tiempo manejando nuestras vidas?