El futbolista Jonathan Fabbro, ex jugador de Boca Juniors y River Plate, se entregó ante la Justicia de Puebla, en México, luego de que Interpol aceptara el pedido del juez Santiago Quian Zavalía, del Juzgado Nacional en lo Criminal N°32, y emitió la “circular roja” para detener a prófugos globales. El deportista había sido imputado por el delito de “abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo” cometido contra su ahijada, de once años. Además, Fabbro también fue acusado por el mismo delito en una causa iniciada en el Ministerio Público Fiscal de Paraguay.

Luego de presentarse en la sede judicial de Puebla, el futbolista argentino –quien se nacionalizó paraguayo– pidió la extracción al país, según confirmó su abogado Rodolfo Baqué. El jugador cargaba con un pedido de captura internacional desde el 4 de diciembre –la misma fecha en que su último club, el Buap de Puebla, decidió rescindirle su contrato– cuando el Zavalía, que investiga la denuncia en la que Fabbro está imputado por el delito de abuso sexual contra su ahijada, pidió la emisión de alerta roja de Interpol. En su solicitud, el magistrado aseguró que “los abusos habrían consistido entre otros en tocamiento en parte de su cuerpo, someterla a que le practique sexo oral y masturbación que empezaron a los 6 años aproximadamente”. Con aquella imputación, Fabbro, de 35 años, podría ser penado con hasta 20 años de cárcel.

La denuncia contra el jugador de la selección paraguaya se había iniciado en abril de este año. En ese momento, la madre de la niña denunció al futbolista, después de que el hermano de la chica descubriera los chats que ella mantenía con Fabbro. El abogado de la familia, Gastón Marano, indicó que el deportista abusó de su ahijada desde 2012 y agregó que “la precisión sobrevino luego de que la niña brindara testimonio ante un equipo del Cuerpo Médico Forense en septiembre de este año”. “La Cámara Gesell, en los delitos de abuso a menores, es la madre de todas las pruebas ya que ratifica la denuncia que llevaron a cabo los adultos. El resultado indicó la certeza científica del relato. No es una novedad para nosotros porque nunca dudamos de lo que ella nos había contado”, completó el letrado.

Pero esta no es la única causa donde Fabbro está imputado por abuso sexual a un menor de edad. El 16 de diciembre, en Paraguay, la fiscal Carla Rojas acusó al futbolista por el mismo delito contra una niña de cinco años. La madre de la menor denunció que Fabbro pretendió obligar a su hija “a practicarle sexo oral”. Desde el Ministerio Público de Paraguay se informó hoy que “la niña será sometida a la Cámara Gesell como anticipo de prueba, para obtener más datos sobre el hecho”.