Argentina siempre fue un país generoso a la hora de aportar equipos que animaran la Copa Libertadores, el torneo más encumbrado de América que se disputa desde 1960. De hecho, Lanús jugó días atrás los dos partidos más importantes desde su centenaria fundación. Si bien el conjunto de Jorge Almirón (flamante DT de Atlético Nacional de Medellín) sucumbió de local ante Gremio de Porto Alegre y sumió de tristeza a la afición granate, para llegar a esa instancia dejó atrás nada menos que a San Lorenzo y a River. De haberse impuesto en la final se hubiera transformado en el noveno conjunto local en hacerse del trofeo. Así las cosas, la semilla nacional parece haber germinado más que bien en el máximo torneo que el año que viene otorgará la nada despreciable suma de 6 millones de dólares al campeón. Para muestra basta un botón: de los ocho equipos que una o más veces se llevaron la gloria, sólo tres no participarán de la edición 2018: Vélez, Argentinos y San Lorenzo. Pero otro dato que también resulta más que atendible es que entre los participantes en la próxima competencia habrá dieciséis entrenadores argentinos, que podrían ser diecisiete si Independiente –que acaba de quedarse sin Ariel Holan tras coronarse en la Sudamericana– contratase a un compatriota. 

Ser director técnico de fútbol no es precisamente tarea sencilla en estos pagos. Es que la alta competencia y la búsqueda de resultados hicieron que en el deporte más popular rodaran cabezas de tal forma que, por caso, en las doce fechas que lleva disputadas la Superliga, 16 entrenadores –Holan, el último en irse, en este caso debido a las amenazas a su familia sufridas por los barrabravas del Rojo– dejaron su cargo por dimisión, despido o por no renovar contrato.

Sin embargo, la misma cifra conformará el número de técnicos que por ahora dirigirá a los equipos que participarán en la próxima Copa Libertadores. Y hasta podrían resultar 17, si acaso Independiente contratase a un DT argentino. La usina de rumores que proviene de Avellaneda indica que el recientemente reelecto Hugo Moyano realizaba sondeos por Matías Almeyda (actualmente en las Chivas de Guadalajara), Pablo Guede (Colo Colo, que integra el Grupo 2 de la Libertadores 2018) y Eduardo Domínguez (Colón, que debe jugar la Copa Sudamericana el próximo año).

En pleno receso futbolero y mientras se aguarda por quién asumirá en el Rojo, Marcelo Gallardo (River), Guillermo Barros Schelotto (Boca), Eduardo Coudet (Racing), Lucas Bernardi (Estudiantes), Ricardo Zielinski (Atlético Tucumán) y Julio César Falcioni (Banfield) van delineando sus respectivos planteles de cara a ese trofeo que le quita el sueño a más de uno.  

Por ahora, el último que ingresó en la destacada lista copera de técnicos argentinos es Néstor Clausen, recientemente conchabado por Oriente Petrolero de Bolivia (juega la fase 1 ante Universitario de Perú). El país del Altiplano también tendrá a Carlos Ischia trabajando para The Strongest. 

Al otro lado de la Cordillera tienen contrato el mencionado Guede en Colo Colo) y Angel Guillermo Hoyos en la U de Chile. Colombia tendrá a Jorge Almirón en Atlético Nacional y a Miguel Angel Russo en Millonarios; Ecuador contará con Gabriel Schurrer (Independiente del Valle), Paraguay con Sebastián Saja (Guaraní), en tanto Pedro Troglio (Universitario) y Oscar Ibáñez (Real Garcilaso) dirigirán conjuntos del Perú. Los únicos que no dispondrán de entrenador criollo son los conjuntos de Brasil, Uruguay y Venezuela. De lo contrario habría argentinos hasta en la sopa.