Se multiplican las quejas del sector agropecuario por la eliminación temporal de las retenciones. Los principales cuestionamientos coinciden en que la medida "sólo benefició a las exportadoras", pero además perjudicó a los distintos segmentos que conforman la actividad porque forzó el aumento de los costos en dólares y desordenó el valor de los cereales y oleaginosas.

“Resulta llamativo que, en tan poco tiempo, la exportación haya presentado tantas declaraciones juradas para cubrir semejante monto", advirtió el presidente de la Sociedad Rural, Nicolás Pino, quién manifestó: “Realmente el ánimo nos duró poquito”.

"Esta resolución alteró el normal funcionamiento del mercado de granos, generó incertidumbre y desconfianza, y solo consolidó ganancias extraordinarias para un reducido grupo de intermediarios, sin aportar soluciones de fondo ni estímulos genuinos a la producción", expresaron desde CARBAP en un comunicado. La entidad también alentó a los productores a actuar con cautela "porque los exportadores pueden haber anotado las DJVE, pero aun tienen que comprar los granos y cuentan con una capacidad de pago muy superior a la que están reconociendo en el mercado".

Carlos Rodríguez, ex asesor de Javier Milei, aseguró que “se gastaron más de 1.500 millones de dólares en un negocio que favoreció a unos pocos grandes exportadores. La gente de campo no recibió nada”. Y denunció: “Para eso hay plata, para comprar remedios para enfermos terminales no hay plata!. Típico de la mesa de dinero que maneja la economía”.