En medio de una serie de versiones contradictorias, la Justicia investiga si Franco Catanzaro, el niño de 7 años que murió el domingo cerca de un balneario privado del Partido de la Costa, estaba o no al volante de un cuatriciclo que fue embestido por un vehículo similar. Hasta ayer se manejaban tres versiones: que estaba al volante, que iba como acompañante o que estaba jugando en la arena cuando se produjo la tragedia. Franco vivía en Bariloche con su madre y estaba de vacaciones en compañía de su padre, que reside en el norte del Gran Buenos Aires. De acuerdo con el parte policial, el niño “conducía un cuatriciclo marca Yamaha 90 CC” y fue embestido por un cuatriciclo Yamaha Raptor 600 CC conducido por Agustín Ciari, de 23 años”. El joven, que sufrió lesiones y fracturas, sigue internado en el Hospital de Pinamar, acusado de “homicidio culposo”. Todo indica que seguirá en libertad hasta que el caso llegue a juicio. 

Una segunda mirada sobre el suceso fue la que dio ayer el intendente de Pinamar, Martín Yezza, quien aseguró primero en su cuenta de Twitter y luego en declaraciones periodísticas que Franco “no iba a bordo del cuatriciclo”. Por el contrario “estaba jugando en la playa cuando un joven de 23 años que iba en un cuatriciclo lo embistió”. Fuentes de ese municipio aclararon a PáginaI12 que si bien el siniestro ocurrió cerca del balneario privado de Costa Esmeralda, en el Partido de la Costa, Yezza se refirió al caso en razón de la polémica que se abrió en Pinamar por las medidas de seguridad que se han tomado en su jurisdicción en materia de circulación de cuatriciclos, luego de la muerte de Mauro Hernán, de 28 años, ocurrida en diciembre en el sector conocido como Complejo Las Dunas. 

A principios de enero, en Monte Hermoso, murió otro joven, Agustín Rebol, de 18 años, al volante de un cuatriciclo.

La tercera versión que analizan los responsables de la Fiscalía Descentralizada número 1 del Partido de La Costa es la versión de algunos testigos que afirman que vieron a Franco en el cuatriciclo, como acompañante, dado que el vehículo, presuntamente, era conducido por un adulto que no fue identificado. 

El intendente Yezza afirmó que al conductor del vehículo que atropelló a Franco “ahora se le inició una causa por homicidio culposo”. Luego de confirmar que Ciari sigue internado en el Hospital de Pinamar con “múltiples fracturas”, estimó que una vez que se recupere de sus lesiones y esté en condiciones de prestar declaración “estará en manos de la Justicia, porque lo que hizo es algo que no corresponde en un lugar que no corresponde”, en referencia a la circulación de cuatriciclos. 

Por su parte, los responsables del complejo Costa Esmeralda, hicieron saber ayer que el accidente se produjo “a aproximadamente dos kilómetros del barrio, fuera del predio del complejo” y que allí “chocaron dos cuatriciclos”, de manera que parecen descartar la versión de Yezza, según la cual Franco estaba jugando en la arena.

El informe, difundido ayer, señaló que “apenas tomaron conocimiento de lo sucedido, personal de seguridad de playa, guardavidas y personal de Securitas de Costa Esmeralda acudieron al lugar del hecho para asistir a los afectados y brindarles los primeros auxilios”. 

El comunicado expresa que “la comunidad de Costa Esmeralda lamenta profundamente lo sucedido y se encuentra acompañando a la familia en este doloroso momento, brindándole todo su apoyo”. 

Fuentes del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires confirmaron que el joven que atropelló a Franco “seguirá en libertad”, una vez que se le dé el alta médica, aunque “continuará involucrado en la investigación hasta que el caso quede totalmente esclarecido”. 

El director de Defensa Civil del Partido de la Costa, Augusto Giachetti, dijo que el hecho ocurrió “en una zona de médanos que es propiedad privada” a la que se accede por la playa de Costa Esmeralda. El municipio envió personal de rescate y bomberos, pero al llegar el menor ya había sido trasladado al Hospital de Pinamar en una camioneta particular”.